El Arte de la Venganza Femenina romance Capítulo 130

Desde pequeño, Samuel jamás soportó que alguien lo llamara cobarde. Ahora, con Raúl poniendo sobre la mesa su relación, lo único que buscaba era advertirle: “Si te metes en problemas, puedes arrastrar a la familia Merino, y a mí también.”

¿Podía echarse para atrás frente a sus amigos?

Por supuesto que no.

Al final, Samuel asintió, aceptando la propuesta de David. Usaron el celular de Raúl para publicar ese video en internet.

El video salió sin ningún tipo de filtro ni edición. Era una grabación tal cual, lista para que cualquier usuario de la red la examinara minuciosamente. En especial porque hay quienes disfrutan analizar cuadro por cuadro para ver si el video fue manipulado o alterado.

Gracias a esos expertos que confirmaron su autenticidad, pronto nadie dudó de que el video era real.

En cuanto se publicó, el video se volvió viral a una velocidad impresionante.

El título original era: [¡Ayuda! ¿Ese es Esteban, el presidente del Grupo Ferreira? ¿Qué está pasando aquí?]

Desde aquella vez que salió la foto de Esteban junto a Lucrecia en la inauguración de la película, su nombre no ha dejado de estar en boca de todos en las redes. Aunque cada tendencia desaparecía en segundos, siempre surgía una nueva.

Esteban tiene un atractivo que eclipsa a cualquier figura del espectáculo. Su cara, perfecta y difícil de igualar, cuando aparece en internet, inevitablemente causa revuelo.

Y por si fuera poco, los rumores lo ligan a una actriz de familia poderosa, la bellísima Lucrecia. Belleza con galán, ambos de élite, además de ser amigos de toda la vida… ¡todas las cartas sobre la mesa para que el escándalo explote!

Justo cuando el escándalo parecía calmarse, nadie se esperaba que a las ocho de la noche del domingo, en pleno horario estelar, un video subido por un usuario anónimo sacudiera el internet como si fuera una bomba.

Tras publicar el video, Samuel y los demás corrieron a Raúl del lugar. David, aún con algo de compasión, le sugirió que escapara esa misma noche y saliera de San Márquez.

Como el video no aclaraba la fecha, todos asumieron que era reciente, probablemente grabado después de la inauguración de Iniciado Desconocido.

Bajo esa suposición, tenía sentido que, después, la mujer tratara a Esteban con desdén y hasta le gritara para que se alejara. Obvio, muchos pensaban que fue por haber visto los rumores entre Esteban y Lucrecia en internet, así que ella le armó una escena.

Pero lo que más llamó la atención fue que la mujer parecía estar embarazada.

Las especulaciones y teorías subieron de tono, alimentando el morbo de todos los que aman husmear en la vida de los ricos y famosos.

¿Por qué pensaban que la mujer del video era una cenicienta y no una heredera? Muy simple: los detectives de internet ya habían rastreado toda su ropa y accesorios. Todo era barato, los mismos modelos se encontraban en tiendas online, y lo más caro era un abrigo de poco más de doscientos pesos. Comparado con los conjuntos exclusivos de Lucrecia, ¿cómo no iba a parecer una cenicienta?

Más cenicienta, imposible. Si no fuera por su cara, que tenía un atractivo especial, hasta la ropa barata se vería fuera de lugar. Pero ella, con pura actitud y belleza, hacía que hasta lo sencillo luciera de lujo.