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El día que mi viudez se canceló romance Capítulo 230

El punto débil de Noelia fue expuesto por un desconocido en internet con apenas unas palabras.

Toda la imagen que tanto se esforzó en construir se vino abajo en un instante.

Noelia temblaba de rabia.

—¿Cómo se atreven a decir que solo estoy aquí por el bebé? Que por eso pude entrar a este centro tan caro… ¡Eso es difamación, voy a buscar un abogado!

Penélope, resignada, intentó calmarla.

—No te enojes con esa gente, seguro fue Marisa, esa tipa no soporta verte bien. Anda ahí difamándote en redes, pero ya que nazca tu bebé, nos encargamos de ella.

Solo escuchar el nombre de Marisa bastó para que Noelia perdiera el control.

Se le enrojecieron los ojos, apretó los dientes y, en su interior, juró que si no se vengaba de Marisa, mejor que ni llevara el apellido Juárez.

Entre sollozos, Noelia marcó el número de Samuel.

—Amor, Marisa no quiere verme feliz. Me difama en internet, dice que solo por el bebé me dejaron quedarme en este centro tan caro. ¡Quiero contratar un abogado!

Noelia lloraba tanto que Samuel ya no sabía qué hacer. Al final, presionado también por Penélope, no tuvo más remedio que ir a verla.

...

En la elegante suite, Noelia estaba recostada en la cama. Cuando escuchó que se abría la puerta, se alteró aún más.

Las lágrimas y los mocos le corrían sin parar.

Apenas Samuel cruzó la puerta, escuchó los lamentos de Noelia.

Por un instante, en su rostro se dibujó una expresión de fastidio.

Antes, Samuel pensaba que el llanto de Noelia tenía algo de conmovedor. Pero desde que ella empezó a engordar por el embarazo, todo le parecía pesado, y verla llorar así solo le daba más ganas de salir corriendo.

Noelia se secaba las lágrimas mientras espiaba con disimulo la reacción de Samuel.

Capítulo 230 1

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