El Regreso de la Heredera Coronada romance Capítulo 45

Investigar a Ángeles con tanto detalle demuestra que esta persona tiene un trasfondo muy inusual.

Y utilizar esta información como material en contra de Ángeles indica que sus motivos no son puros.

Ahora que Ángeles ha sido reconocida y llevada de vuelta a Casa Castro como la hija biológica de la familia Castro, ha pasado de ser una chica pobre a la hija dorada de una familia acaudalada.

¿Cómo no iba a haber envidia?

Sin mencionar que los seguidores de Paula son numerosos y algunos, incluso para defender a Paula, usarían cualquier método para acosar y aislar a Ángeles.

Esto puede convertirse en un asunto menor o mayor.

Si la persona acosada no tiene una psique suficientemente fuerte, ¿podría desarrollar problemas psicológicos y volverse cada vez más insegura bajo el acoso constante? ¿Sus calificaciones podrían desplomarse? ¿Podría incluso llegar a extremos?

Rafael, pensativo por un momento, preguntó: —¿Podría ser Ignacio?

Ignacio ya había intentado secuestrar a Ángeles anteriormente, por lo que es muy sospechoso en este caso, y con el trasfondo de la familia López, ciertamente es posible que él pudiera hacer algo así.

Paula respiró aliviada e inocentemente dijo: —Podría ser.

Justo cuando Nancy estaba a punto de golpear la mesa, escuchó a Ángeles decir: —No es él.

—¿Por qué estás tan segura? —preguntó Nancy confundida. —Ángeles, ¿acaso sabes quién está detrás de todo esto?

Ángeles respondió y pronunció el nombre de Oscar.

No podía ser otro más que él.

Al oír esto, los rostros de los padres de Rafael se tornaron extremadamente expresivos.

¡Esto también puede ser algo bueno que surge de algo malo!

Por primera vez, Ángeles encontró agradable escuchar a los padres de Rafael hablar así, saber decir no a un matrimonio no deseado era lo mejor.

Finalmente, bajo la mirada de Nancy, Paula, aunque a regañadientes, grabó todos los nombres de usuario del grupo de chat y las ofensas hacia Ángeles, y Rafael personalmente se encargó de enviarlo al presidente de la escuela.

Casi todos eran novatos de ese año en la Universidad de la Luz de la Luna, y difamar a un compañero de esta manera era de una naturaleza repugnante, especialmente considerando que Ángeles era vista como una figura importante por el presidente de la escuela, por lo que seguramente tomarían medidas severas.

Aun así, para estar más segura, Nancy dijo: —Ángeles, cuando empiece el curso, mamá hará que el chofer te lleve y te traiga todos los días.

—Prefiero quedarme en la residencia estudiantil. —Esta fue una decisión que Ángeles ya había tomado.

Nancy, sorprendida, expresó su preocupación: —Vivir en la residencia no es tan cómodo como en casa, la comida no es tan saludable, y me preocupa que sufras acoso escolar.