El Regreso de la Heredera Coronada romance Capítulo 598

Samuel se agarraba el cabello y se cubría la cabeza mostrando un gesto de profundo dolor.

El encargado de investigar el caso era el mercenario más pequeño y delgado de todos, apodado "Mono". Él preguntó: —Antes de desaparecer, ¿a qué lugares había ido tu novia?

Samuel recordó por un instante y respondió: —A la escuela, a la tienda de bebidas, a la librería, caminó dos veces por esa calle, siempre estuve con ella.

Recordó algo más y añadió: —Ah, y espera también al hospital, fuimos a registrar a su abuela para una consulta de la pierna, solo recogieron algunos medicamentos y salimos rápidamente, también estuve con ella.

—¿No hay más?

—No, eso es todo.

—Está bien, he anotado todo. Si necesito más información de tu parte, te contactaré. ¿Me dejas tu número de contacto? — El Mono, sosteniendo con elegancia su libreta con una mano y un bolígrafo en la otra, tenía un aire de seriedad que resultaba ser bastante convincente.

Al menos desde el vídeo, era imposible discernir que su verdadera identidad era la de un mercenario.

Samuel se apresuró enseguida a dar su número.

Una vez obtenida toda la información, el Mono se giró para irse, pero Samuel de inmediato lo detuvo cautelosamente.

Con los ojos enrojecidos, le suplicó: —Por favor, si encuentras alguna pista, avísame de inmediato. Si... si tienes la capacidad suficiente, por favor, sálvala.

Antes de venir, el Mono se había creado una identidad falsa de investigador, diciendo que investigaría a fondo la desaparición de Ximena y organizaría un rescate.

Samuel en realidad no creía en ello.

Pero ya no tenía otra opción.

En ese instante, la única persona dispuesta a "engañar" para obtener esta información podría ser alguien definitivamente dispuesto a ayudarlo a buscarla.

El Mono se despidió y se marchó.

El vídeo terminó aquí.

Bárbara estaba confundida: —¿Qué podía significar eso? Podría ser solo una coincidencia.

—No existían tales coincidencias.— Ángeles la bservó, con una mirada serena: —Definitivamente hay algo artificial aquí, alguien las ha estado observando, y eso ha creado esta coincidencia.

—O quizás... desde el principio, alguien ha estado seleccionando de manera extensiva, y ellas son el resultado de esa minuciosa selección.

—Por supuesto, esto es solo una hipótesis mía, podría no ser correcta.

Después de hablar por un buen rato, Ángeles cogió su celular y llamó al Mono, instruyéndole que investigara específicamente qué pruebas se habían realizado y qué información habían dejado en el hospital a todas las chicas, incluyendo a Ximena, antes de desaparecer.

El Mono, rápido de mente, pronto comprendió la razón y, al recibir las estrictas instrucciones de Ángeles, respondió adulador:

—Claro, ¿cómo no se me ocurrió? ¡La jefe es excepcional, con solo haber mirado un documento ya detectó indicios y encontró una pista tan importante, e impresionante como esta!

—Jefe, voy a investigar de inmediato.