El Regreso Del Yerno Misterioso romance Capítulo 16

Cuando la familia Coronel bajó al segundo piso del hotel, todos los autos en el estacionamiento, en el cual podían caber hasta mil vehículos, fueron reubicados. Este estacionamiento era propiedad del hotel y solo aquellos que asistían a los eventos tenían permitido dejar sus autos, por lo que nunca llegaba a su máxima capacidad y se podían colocar fácilmente unos cuantos cientos de autos. Sin embargo, en esta ocasión fue necesario que todos los autos salieran del estacionamiento; ni siquiera se les permitió dejar autos de alta gama como Ferrari y Lamborghini. Los dueños de todos estos autos salieron al estacionamiento para prevenir que los sacaran, pero todo fue en vano. La familia Coronel podía ver claramente a la gente de la alta sociedad haciendo un alboroto, lo que resultó en que fueran golpeados por los guardias de seguridad del hotel y echados del estacionamiento como si fueran bolsas de basura.

-¿Quién crees que sea esta persona tan importante? -preguntó Liliana con el rostro lleno de asombro. —Tengo entendido que toda esta gente adinerada viene de familias con propiedades de cientos de millones, pero los guardias se atreven a tratarlos de esta manera. ¡Es evidente que esta persona tiene mucho poder e influencia!

-Esta gente no son nada. ¿Ya viste ese auto? Es un Rolls-Royce, debe valer alrededor de 8 millones y le pertenece al líder de la pandilla de la calle norte. Están sacando su auto en grúa y no puede hacer nada más que quedarse viendo. ¡No se atreve a poner resistencia alguna!

-Eso no es todo. Miren... el Lamborghini de allá vale 1.7 millones y es del sucesor de la familia Hurtado, una de las 10 familias más influyentes de todo Eastcliffe, pero su auto se lo está llevando la grúa también.

—¡Dios mío! ¿Cuánto poder debe tener esta persona para no temerle a los 10 Grandes?

Todos los presentes no paraban de hablar de la situación con los rostros llenos de asombro; no podían dejar de ver a todas estas personas tan importantes con admiración. Pero la cosa no terminó ahí. Una vez que todos los autos fueron removidos del estacionamiento, más de 10 camionetas MPV hicieron su entrada.

Carlos exclamó impactado:

-¿Quién podría tener tantos MPV? Todos

son Toyotas Alphard, no es un modelo común aquí.

-No solo son raros, mi punto es... nunca había visto tantas camionetas Alphard en un mismo lugar.

-Este modelo es normalmente usado por celebridades ya que los asientos son muy cómodos y tienen suficiente espacio adentro para poder vestirse y maquillarse.

—¡Tienes razón! Mira. ¡Ese es Thomas Hiddlestone!

-¡Qué! ¿Dónde? ¿Dónde?

—Miren. ¡También está Stephanie McKay, una de las actrices más famosas del momento!

—¡Oh por Dios! No puedo creer que está aquí.

-No solo es ella. ¡También viene el presentador de televisión, Enrique!

-¡Cuántas celeridades! ¿Será que una de las agencias de entretenimiento está organizando la cena anual aquí?

-No es posible. Si fuera el caso, no sería lo suficientemente importante como para sacar los autos de los 10 Grandes.

—Pero entonces, ¿quién es el responsable de este suceso tan extravagante?

La gente no dejaba de exclamar sorprendida, el momento era simplemente increíble. En ese momento, las puertas del estacionamiento se abrieron de repente. Todos miraron a Carlos con los ojos abiertos de par en par cuando dijo:

—Miren. Ese es el Rolls-Royce modelo vintage de Don Lizárraga. ¡Una de las familias de los 10 Grandes!

-Dios mío, miren el auto que viene detrás. Es Don Cruz, otro de los 10 Grandes.

-Allá está el auto del presidente de la empresa más grande de Eastcliff...

Todos quedaron sorprendidos mientras entraba auto tras auto. Todos los personajes que hacían su entrada eran personalidades respetables entre los cuales se encontraban las personas más influyentes y poderosas de la ciudad, todas fuera del alcance de la humilde familia Coronel. Lo más sorprendente fue que al entrar, todos los autos se estacionaban en los cajones laterales para dejar el espacio de en medio vacío, como si fueran solo actores secundarios en una película abriendo el paso para la atracción principal que está por llegar. No había duda alguna que ninguno de los autos se atrevió a tomar el espacio del medio para guardarlos para esta persona tan importante.

Todos los invitados quedaron boquiabiertos pues todas estas personas eran personajes bastante importantes en la ciudad. ¿Quién tiene tanto poder como para hacerlos esperar con tanto respeto? Mientras la familia Coronel estaba paralizada por tanta confusión, un grupo de hombres entraron al salón con algunos artículos en mano. Más tarde, entró otro grupo empujando un carrito con un pastel gigantesco. El pastel era magnífico, con nueve niveles, cada uno de los cuales estaba decorado con accesorios de cristal. Lo más llamativo eran las dos figuras grabadas que estaban colocadas encima del pastel. Una de las figuras era una joven con un vestido blanco, mientras que la otra era de un hombre en traje arrodillado con una pequeña caja en las manos. Dentro de esta había un anillo de diamantes con un brillo impresionante.

-¡Qué pastel tan hermoso! -Varias mujeres no pudieron contenerse de la emoción.

—Mira ese anillo. ¿Será real?

—Dios mío, ¿habrá una propuesta de matrimonio? ¡Qué romántico!

-Si alguien me pidiera matrimonio así, diría que sí al instante.

Carlos, quien conocía a uno de los hombres que llevaba el carrito, corrió hacia él y al regresar, estaba atónito.

—¿Qué pasó? —preguntó Liliana.

-Ya lo sé todo. -Carlos bajó la voz y le contó a Liliana con la cara llena de envidia. -Según mi amigo, van a celebrar el cumpleaños de una chica en el noveno piso. Todas estas celebridades vienen a la celebración y el anillo en el pastel es real. Debe valer más de 3 millones.

-¡¿Cómo?! -Todos gritaron de la impresión mientras los ojos de Liliana se llenaron de envidia. —¿Quién será la afortunada de ser tratada así? Dios... Si yo fuera ella podría morir feliz sin ningún remordimiento.

El resto de las mujeres se notaban llenas de celos también. Todas deseaban que algún día pudieran ser tratadas con tanto protagonismo. Una celebración de cumpleaños tan espectacular como esta debería ser más que suficiente para que cualquiera se enamore del hombre que organizó todo esto.

-En serio, ¿quién será la afortunada? -preguntó una de las mujeres. -Me imagino que deberá ser una de las damas de los 10 Grandes.

-¡No lo creo! -dijo Carlos sacudiendo la cabeza de lado a lado. -Mi amigo me dijo que es una chica misteriosa, nadie sabe quién es. Pero si del algo estoy seguro es que no es ninguna de los 10 Grandes. Esas señoritas no merecen el honor de una celebración de esta magnitud.

-En ese caso, ¿quién podrá ser? -Todos se preguntaron.

En ese momento, Liliana miró a Sasha y le preguntó con un tono sarcástico:

-Sasha, ¿no será que es la celebración de cumpleaños que Mateo preparó para ti?

Todos vieron a Sasha con miradas burlonas y pensaron que claramente no era posible que Mateo fuera el responsable de todo esto. Sasha no estaba de buen humor, sabía que Liliana dijo eso para avergonzarla.

—Así es, todo esto es por el cumpleaños de Sasha —dijo Mateo con una voz tranquila.

-Mateo, esto es impresionante -se burló Carlos. En serio debes llevarnos al noveno piso. Nunca he puesto un pie ahí en toda mi vida.

—Pero entonces... ¿A quién viene a celebrar?

Mientras todos balbuceaban sorprendidos, rápidamente se dirigieron hacia las ventanas para ver a Guillermo. Incluso Erick Coronel estaba impactado. Esto se robó la atención de la situación de Sasha y corrió hacia la ventana. Como el líder de una pequeña e insignificante familia, nunca imaginaría poder conocer a una persona como Guillermo en persona.

-Es verdaderamente una sorpresa que el señor Navarro esté aquí. Don Coronel, le sugiero que se tranquilice pues yo soy alguien muy cercano al señor Navarro. Una vez que terminemos, será un placer presentarlo con él —dijo Clemente con voz arrogante a pesar de haber sido de los primeros en reaccionar y correr a la ventana al escuchar de la llegada de Guillermo.

-¡Se lo agradecería mucho! -Erick estaba eufórico y pensó en cómo el estatus de la familia Coronel podría subir en el futuro si llegara a conocer a Guillermo Navarro.

-¡No es la gran cosa! -Con una gran sonrisa en el rostro, Clemente miró a Sasha y continuó:

-Pero la señorita Coronel...

-No se preocupe. ¡Resolveré esto de inmediato! -Erick miró a Carlos y le ordenó:

—No me importa cómo lo hagas, pero necesito que esta perra pase la noche con el señor Sánchez. ¡A como dé lugar!

Un brillo lleno de maldad apareció en los ojos de Carlos al escuchar a Erick. -No se preocupe abuelo. ¡Déjemelo a mí! -En ese instante, Carlos reunió a un grupo de hombres y se acercaron para rodear a Mateo y a Sasha.

-Sasha, el abuelo ha dijo que debes cumplir con tu parte del trato esta noche. -Con una voz amenazante, continuó:

-Si no quieres ver cómo Mateo es lanzado desde el techo del hotel, hazme caso y cierra el acuerdo. De lo contrario... terminarás siendo viuda esta noche.

Sasha no lo podía creer y sintiéndose amenazada, preguntó:

-¿Qué piensan hacer? ¿No pueden romper la Ley?

-¡Yo soy la Ley aquí! -exclamó Carlos. -¿Lo harás o no?

Varios hombres comenzaron a acercarse a Mateo y estaban listos para aprenderlo en cualquier segundo. En ese momento, las puertas principales del salón se abrieron y entró nada más y nada menos que Salvador Cárdenas con un grupo de hombres.

-¡Presidente Cárdenas! -exclamó Clemente con una reverencia.

Erick estaba emocionado de ver a Salvador en persona ya que este hombre era capaz de establecer el destino de toda su familia. No pudo evitar preguntarse: «¿Qué hace el señor Cárdenas aquí? ¿Será que viene a mi celebración de cumpleaños? Dios mío, si es así, la familia Coronel tendrán un mejor estatus en el futuro.» Erick rápidamente puso su mejor cara y se acercó para saludar. -Presidente Cárdenas...

Sin embargo, Salvador los ignoró y se dirigió directamente a Mateo y Sasha. Los invitados no podían creer lo que

estaba pasando cuando Salvador con una reverencia dijo:

-Señor Lara, señorita Coronel, la celebración de cumpleaños está lista. El señor Navarro los invita a subir al noveno piso.

Todos en el salón quedaron impresionados.