Los chismes son como moscas en verano: se propagan, pero también mueren rápido.
La noticia sobre Scarlett yendo a prisión se desvaneció más rápido de lo habitual, e incluso el lanzamiento de su película un año después, apenas causó revuelo. Durante un tiempo fue infame por todos los rumores sobre su aborto espontáneo, el intento de asesinato y su divorcio de Sebastián Knight, pero esas historias pronto rozaron el borde del mito, como que ya había muerto en prisión, poco después, desaparecieron por completo.
La gente tiene memoria corta. Solo recuerdan lo que ven, y últimamente, lo que veían era a Ava Knight.
Sí, la famosa actriz que ganó un montón de premios, se casó con su primer amor de la infancia, el famoso CEO del Imperio Knight, y se convirtió en la dueña de la Casa Z. Oficialmente registrada, ni más ni menos.
Pero esas no son las razones por las que la gente hablaba de ella. La gente hablaba de ella porque llevó la Casa Z a la ruina, y a su esposo multimillonario parecía no importarle en absoluto. Qué indulgente, decían de él, darle a tu amada esposa una empresa de millones de dólares solo para jugar, sin importarle si la arruinaba.
La gente hablaba de ella por la película que James Deep hizo para ella, pintando la imagen más romántica de su historia de amor con Sebastián Knight durante sus días escolares.
Pero esas son eran noticias momentáneas. De lo que más hablaba la gente sobre ella fue de que asistió sola a su boda. El novio ni siquiera apareció en el altar, ella subió y terminó los votos por su cuenta mientras su novio, ahora su esposo, Sebastián Knight, fue visto a miles de kilómetros de distancia en su isla privada con un montón de modelos en sus brazos.
Sí, la gente olvida, pero internet no.
La imagen de Ava Knight con su amarga sonrisa y lágrimas en los ojos, sola en el altar diciendo sus votos, todavía aparecía de vez en cuando. Incluso controlar la Casa Z, la boca de los nuevos medios, no le ayudó demasiado.
Algunos decían que llevó la Casa Z al desastre precisamente porque intentó usarla para su interés personal, como por ejemplo, hacer desaparecer esa foto, pero cuanto más lo intentaba, más aparecía.
Nunca se la vio junto a su esposo otra vez, ni antes, ni después de la boda. Cada vez que ella aparecía en las noticias con una nueva película, otro anuncio o algo así, era casi seguro que su esposo también lo haría. Excepto que para él siempre habían sido noticias de escándalos, viajando aquí y allá con diferentes mujeres a su lado.
Algunos decían que él la odiaba, otros que tenía una amante secreta escondida en algún lugar, otros simplemente se encogían de hombros y decían que así eran los multimillonarios; claro que pueden mimarte como si fueras una reina, pero una vez que te tienen, se olvidan de ti.


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Los comentarios de los lectores sobre la novela: Ella Aceptó el Divorcio, Él entró en Pánico