Ella Aceptó el Divorcio, Él entró en Pánico romance Capítulo 46

Perspectiva de Scarlett

Todos vieron que Ava estaba mintiendo. Olivia también, pero prefirió sembrar cizaña en vez de asumir su culpa.

Olivia era la que insultaba a Lilith. Si se disculpaba, la verían como la villana, así que insistía en que solo lo hizo para defender a su supuesta mejor amiga. Ahora ella se iba a llevar un buen tortazo en la cara.

"Yo... nunca te mostré ningún vestido, Olivia..." Ava levanta la vista hacia Olivia, con un voz temblorosa y un dolor fingido. "Lo siento si te equivocaste en algo, pero nunca dije que el vestido de Lilith fuera una copia falsa..."

"Pero dijiste..." Olivia le responde con furia, solo para quedarse congelada con una expresión de horror.

Muevo lentamente la cabeza. Olivia es demasiado ingenua. No sabe en el enrollo que se metió. Ava es muy hábil mintiendo y nunca deja nada al azar cuando lo hace. Lo más probable es que Ava le haya insinuado a Olivia y a los demás que tenía el mismo vestido que Lilith. Quizás haya dicho una o dos frases sobre lo pobre que es Lilith.

Y eso le dio a Olivia la impresión de que el vestido que Lilith llevaba era una copia falsa. Esa es el tipo de gente que les gusta humillar, solo para sentirse superiores por diversión.

Ni Olivia ni Ava son inocentes en esto. Ambas son malvadas por igual. Solo que Ava es mucho más tóxica que Olivia.

"¡Maldita! ¡Me has usado!" Olivia se descontrola y grita mientras intenta golpear con su bolso a Ava.

Sebastián atrapa su muñeca antes de que llegue a golpear a Ava.

El espectáculo se ha vuelto aburrido. Lo miro con ojos fríos. ¿Acaso Olivia no sabe que Ava tiene un guardaespaldas que la protege incondicionalmente?

"Basta." Sebastián le advierte con una voz baja y tranquila, y el miedo se apodera de Olivia. Se perdió en el momento y olvidó que el guardaespaldas de Ava controla a todos aquellos que quieren triunfar en el mundo del espectáculo. Bueno, al menos a la mitad de ellos.

"Mi papá me compró uno parecido." Ava susurra, pero lo hizo para que todos la oyeran. "Fue un malentendido...

"Le pido disculpas por lo que pasó." Sebastián se gira hacia el hombre desconocido. "Parece que fue un malentendido desafortunado. Ava es mi amiga. Acepte mis disculpas por Ava."

El hombre le lanza una mirada indiferente. Sebastián frunce el ceño. Nadie se ha atrevido a tratar tan despreciablemente al “príncipe” de la ciudad. Pero él es el que se ofrece a disculparse en nombre de Ava. Así que no protesta ante la actitud grosera del hombre, sino que se gira hacia Lilith y se disculpa.

Lilith asiente con la cabeza, se muestra tan fría como el hombre desconocido.

La Dama de Hierro puede ser intimidante cuando pone una cara seria. Hasta Lilith lo sintió:

"Estoy bien aquí. Puedes irte con ella. Tengo a Aurora conmigo." agrega rápidamente.

La abuela le hace un gesto a Lilith y se va. La sigo, con el corazón palpitante.

Parecía muy seria, pero no puedo imaginar para qué. No puede estar molesta por haber invitado a Lilith, ¿verdad? Hace un momento parecía conforme con el discurso de Lilith.

Pero rara vez me habla con tanta severidad y con esa cara seria. No desde que me perdonó mi “chantaje” hace cinco años. Quizás le molestó el escándalo en su fiesta.

La abuela sube la escalera hasta la plataforma interior que da a la sala de baile. Un lugar tranquilo para hablar, sin abandonar la fiesta y sin dejar a la anfitriona sola.

La sigo y me quedo a su lado. Ella no dice nada, y yo tampoco me atrevo a abrir la boca. Miro hacia donde ella está mirando, y veo a Sebastián y a Ava en una esquina.

"Scarlett." La abuela finalmente me habla. "¿Algo pasó entre tú y Sebastián?"