Esposa Pecadora romance Capítulo 487

¿Hijo?

Madeline se quedó atónita.

'Meredith me mintió. Di a luz a un hijo, no a una hija’.

Madeline sintió que su corazón se detenía.

La duda tiñó su mirada, mientras observaba al alegre hombre.

Al leer las palabras que quedaban sin pronunciar en los ojos de Madeline, Jeremy la miró antes de asentir con peso.

Madeline sintió que toda duda se desvanecía en su corazón, ante su silencioso reconocimiento, y se bajó rápidamente del coche. Entró corriendo en la mansión Montgomery a grandes pasos.

Jeremy cerró los ojos con remordimiento mientras miraba la figura impaciente de Madeline.

Claro, Meredith era atroz, pero ¿él no lo era también?

Era la hora de la cena dentro de la mansión y Eloise caminaba hacia el comedor con Sean a su lado y la mano de Jackson entre las suyas, cuando un criado proclamó de repente: "¡Señor, señora, la Srta. Eveline ha vuelto!".

Ni Eloise ni Sean podían creer lo que oían. Al darse la vuelta al mismo tiempo, la pareja se encontró con una Madeline impaciente, sorprendida y eufórica.

"¡Eveline!", Eloise llamó a Madeline con cariño, antes de poder contenerse.

Sean observó a Madeline acercarse a ellos, con esperanza y felicidad en los ojos. "Llegas justo a tiempo, Eveline. Ven a cenar con tu madre y tu padre".

Mirando a la pareja que tenía delante, era evidente que Madeline no estaba pensando en ellos.

Impaciente, comenzó a escudriñar su entorno, antes de que sus ojos se posaran de repente en la pequeña figura de Jackson, que salía de detrás de Eloise y Sean.

"Mamá", saludó Jackson a Madeline, con coquetería.

Las mejillas del chico, tan infantiles, se llenaron de una sonrisa angelical.

Madeline sintió que su corazón se aceleraba, de repente, mientras miraba a Jackson.

En ese momento, Madeline sintió que su corazón empezaba a temblar.

Levantó su mirada empañada, para encontrarse con la mirada cariñosa y culpable de Jeremy.

Jeremy alargó la mano para secar las lágrimas que se acumulaban en las comisuras de los ojos de Madeline, con un delgado dedo.

"Jack es el niño que te obligaron a dar a luz, en la cárcel, Madeline. Jack es nuestro hijo".

Las lágrimas en los ojos de Madeline, cayeron implacables, en el momento en que él lo confirmó.

Mirando aturdidamente a Jeremy, Madeline finalmente desvió su mirada para mirar al pequeño muchacho, que estaba frente a ella.

Jackson miró hacia atrás, con confusión en sus ojos de mármol puro, aunque una sonrisa inocente permanecía en sus mejillas cubiertas de rocío.

El corazón de Madeline se rompió.