Esposa Pecadora romance Capítulo 667

La cara de Jeremy parecía preocupada, pero seguía sin poder ubicar la figura de Madeline en la oscuridad.

Aunque Madeline ya no era una mujer débil, seguía estando inevitablemente sorprendida cuando veía una lagartija arrastrándose junto a ella tan repentinamente. Tampoco esperaba que Jeremy entrara de repente, con tanta preocupación.

"¿Linnie? ¿Qué te ha pasado? ¿Dónde estás?". Jeremy tanteó el terreno. Había una intensa inquietud y preocupación en su tono de voz.

Madeline estaba de pie a un lado, y vio cómo Jeremy la buscaba confundido, mientras su corazón temblaba en secreto.

"Linnie, por favor, contéstame rápido. ¿Dónde estás?", volvió a preguntar nervioso. Madeline no pudo seguir guardando silencio.

"Estoy aquí".

En cuanto escuchó la voz de Madeline, Jeremy siguió la dirección de la que procedía. En cuanto tocó el cuerpo de Madeline, la abrazó con fuerza, mientras deseaba poder fundirla en su propia sangre.

"¿Estás bien?". Su voz grave temblaba, con una pizca de tensión.

Madeline se quedó boquiabierta durante dos segundos, antes de responder: "Estoy bien. Acabo de ver una lagartija que se arrastraba, así que he gritado un poco".

"Me alegro. Me alegra saber que estás bien". Parecía que ahora solo le quedaba suspirar de alivio.

Aunque obviamente era ella la que estaba sorprendida, era él quien estaba asustado.

Pensando en la reacción de Jeremy hace un momento, Madeline sonrió ligeramente y dijo en tono juguetón: "Sr. Whitman, ¿no tiene ya un nuevo interés amoroso? ¿Y no le importa ya su ex esposa desde hace mucho tiempo? ¿Por qué te preocupa si estoy bien o no?".

Al escuchar sus palabras, Jeremy se dio cuenta de que había perdido la compostura.

De hecho, ya había perdido la compostura en la playa de Colina Abril, cuando los tres vándalos planeaban juguetear con Madeline.

Podía fingir que había dejado atrás el pasado, pero durante la situación de emergencia que había sucedido, no podía ignorar su existencia.

Jeremy soltó rápidamente su mano. "La Srta. Montgomery es una mujer, así que, como hombre, tengo que echar una mano cuando una mujer está en peligro". Encontró una excusa muy razonable para sí mismo.

La propietaria sonrió y dejó las tazas y los platillos. "Es tu novio el que es considerado. Le preocupaba que pudieras resfriarte por la lluvia, así que me pidió específicamente que te preparara esto".

Madeline se sorprendió al escuchar decir esto a la propietaria.

Solo recobró el sentido cuando oyó un estruendo en el baño. Para entonces, se dio cuenta de que la propietaria se había ido.

Madeline se dirigió hacia la puerta del baño, suponiendo que Jeremy podría haberse tropezado con algo, ya que no podía ver.

Pensó que Jeremy le pediría ayuda, pero no dijo nada hasta que salió de la ducha.

Madeline miró al hombre que avanzaba con cautela. Con una toalla cubriéndole el cuerpo, caminaba lentamente. Algunos mechones de pelo en la frente aún goteaban gotas de agua, lo que añadía un poco de encanto a una noche como aquella.

Madeline le entregó una taza de té de jengibre a Jeremy y le dijo: "Bebe este té de jengibre que nos ha traído la propietaria".