Héroe Retrasado romance Capítulo 515

Jiang Ning colgó. Wang Wei se quedó pasmado. ¿Qué estaba haciendo Jiang Ning? ¿Con quién hablaba? Sonaba como si estuviera hablando con un subordinado y le dijera que resolviera algo dentro de los círculos legales. ¿Quería que ese hermano cambiara la mala cultura que había ahí? Tenía que ser una broma. Eso era parte del círculo legal. No era algo en lo que el círculo ilegal pudiera interferir. Podría traerles muchos problemas.

Wang Wei estaba a punto de aconsejarle a Jiang Ning que no lo hiciera cuando sonó su teléfono. Lo miró y vio que era el asistente de dirección del Departamento de Salud, entonces no se atrevió a ofenderlo.

―Hola, director Xu. Ya envié los boletos que pidió… ¿cómo? ¿Los está devolviendo?

El tono de Wang Wei se hizo muy agudo. Creyó haber escuchado mal. Le iba a devolver los boletos que le habían pedido.

―No, por favor. ¡Por favor! ―Wang Wei creyó que debía haber hecho algo mal, así que rápidamente respondió―: Seguro que fallé en algunas cosas. Por favor, no se enoje, director Xu. Este concierto…

Antes de que terminara esa frase, la otra persona habló con aún más nerviosismo. Parecía que le rogaba para devolverle los boletos. Insistió en hacerlo y hasta los iba a llevar en persona. También le dijo a Wang Wei que no se lo tomara a pecho.

Wang Wei seguía atolondrado al colgar. Miró a Jiang Ning. Él había hecho una llamada justo antes. Le había dicho a un tal Fei que la cultura de ahí no era buena y necesitaba cambiarse, luego, entró una llamada para él. ¿Era coincidencia? Pues sería demasiada coincidencia, ¿no? Podría ser…

¡Riiiing!

Antes de que pudiera decir algo, su teléfono sonó de nuevo. Al contestar, la persona del otro lado de la línea también quería devolver los boletos gratis. Después de eso, Wang Wei recibió otra docena de llamadas para disculparse y devolverle los boletos gratis. Todos sonaban muy nerviosos y asustados, como ratones que hubieran visto un gato.

A Wang Wei nunca lo habían tratado así. Cuando hacía negocios con ellos, tenía que humillarse e intentar adularlos. Entonces, ¿por qué hoy era al revés? Tenía la mente un poco en blanco. Hizo un conteo aproximado y parecía que le habían devuelto todos los boletos que había regalado, así que el teléfono no sonaría más.

Wang Wei respiró hondo.

Era el número de una persona que tenía el cargo más importante en el gobierno de Shenghai. Jiang Ning siguió bebiendo su té y no se inmutó. Wang Wei sintió un nudo en la garganta y contestó. Saludó cortésmente:

―Hola, habla Wang Wei, director de Star Entertainment.

―Director Wang, lamento que los departamentos de Shenghai hayan pedido sin razón esos boletos para el concierto de su compañía. Quiero disculparme a nombre de todos.

BOOM.

La voz era idéntica a la de ese tipo que siempre veía en la tele. ¿Estaba disculpándose con él? ¡Él tenía el cargo más importante de la ciudad!