La Caída y el Rescate del Amor romance Capítulo 149

Al escuchar a Selena preguntar eso, David extendió su mano y la apoyó en el marco de la puerta junto a su cabeza.

Selena se apoyó hacia atrás involuntariamente, pero aun así quedó envuelta en el abrazo estrecho de David.

Ella levantó la mirada hacia sus ojos, negros como la noche.

David tomó sus labios, abrió la boca, levantó su labio inferior y le dio un suave mordisco.

"¡Mujer sin corazón ni cerebro!"

"Oye..."

Sus ojos estaban llenos de protesta.

Él se acercó a ella, su voz era baja. Al hablar, sus labios fríos tocaron los de ella. Cada palabra que decía era como un beso ligero y superficial. "No verte en un día, hace que sienta enfermo de amor. Ahora te vas a mudar, ¿no es eso cruel?"

"Boom..."

¡La cara de Selena se puso roja de vergüenza al instante!

Su corazón parecía a punto de explotar dentro de su pecho.

Su cabeza quedó en blanco por un momento.

Se había preparado para escuchar sus palabras dulces, pero ¡no esperaba que fueran tan poderosas!

No verla en un día, enfermo de amor...

Sus pestañas temblaban levemente mientras miraba a este hombre tan guapo de cerca y su corazón latía con fuerza.

¡Este hombre!

Este hombre era realmente...

La primera impresión de una persona es fácil de recordar.

La primera vez que se encontraron en el hospital, ella lo vio como un hombre noble y distante.

Era tranquilo, calmado, elegante, cortés y emanaba un aura de abstinencia.

No parecía ser un hombre que se detuviera por una mujer.

Pero nunca imaginó, que este hombre, cuando corteja a una mujer, es simplemente... imbatible.

Lo peor es que es guapo y de abstemia de cortejar a las mujeres, ahora ¿quién podría resistirse?

¡Por supuesto que le importaba!

¿Cómo podría dejar que otros tuvieran lo que él quería?

Algo pareció llenar el corazón de Selena, llevándolo hasta el borde.

Retiró la mano que había estado en su frente y lo miró con una sonrisa.

"Estoy diciendo la verdad, el amor no es tan fácil. Todavía tenemos que seguir trabajando duro. ¡Vamos!"

Selena levantó la mano y ajustó cuidadosamente la corbata que le había hecho.

Viendo la cara de David un poco sombría, Selena no pudo evitar levantarse de puntillas y darle un ligero beso en la barbilla.

"Te esperaré, esperaré a que me lleves a casa."

Las pupilas de David se contrajeron al instante, la ira que había estado en su corazón se disipó gradualmente, desapareciendo sin dejar rastro.

Después de unos segundos de reflexión, volvió a hablar.

"Puedes mudarte, yo te ayudaré a encontrar una casa."