La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 1223

Al mencionar el pasado, Floyd tenía una rara y cálida sonrisa en su rostro.

Nicole estaba avergonzada.

“Creo que lo recordaste mal, Papá. ¡Nunca he tenido malas calificaciones!”.

Grant resopló con desdén.

“Antes de que yo fuera tu tutor, definitivamente eras el primer puesto de la clase, contando hacia atrás, claro”.

Grant la expuso sin escrúpulos.

Ella se quedó sin palabras. ‘¿En serio tenía que decir eso? ¿Acaso no somos realmente familia? ¿Por qué tenemos que hacernos daño? No, ¡¿por qué tenían que hacerme daño?!’.

Clayton no podía evitar reírse. Sus ojos se volvieron más amables y curiosos mientras miraba a Nicole.

Era una historia muy bonita. Quería saber más.

Los desconocidos veían a Nicole como excelente y perfecta, pero ¿ella había tenido malas calificaciones antes?

Después del postre, aún faltaba un rato para el almuerzo.

Floyd no podía estar tranquilo y llamó a Grant al estudio para hablar.

Aunque Nicole podía defenderse en el mundo de los negocios, había algunas cosas turbias que nunca la habían dejado involucrarse.

Por lo tanto, Grant tenía que tomar su lugar.

Aida estaba con Nicole y Clayton. Su postura al comer era elegante e impecable.

Nicole y Clayton se miraban de vez en cuando, sonriendo tiernamente.

El aire parecía estar impregnado de un olor dulce.

Aida sonrió y bajó la mirada suavemente.

“¿Los estoy molestando? ¿Quieren hablar íntimamente?”.

Nicole se quedó atónita y sus movimientos se congelaron.

Al instante se sintió un poco avergonzada tras escuchar el tono juguetón en la voz de Aida.

“Aida…”.

La relación de Nicole y Clayton no había sido anunciada oficialmente en la familia Stanton.

Sin embargo, Grant ya lo sabía, y Floyd solo fingía no saberlo.

Clayton sonrió con modestia. “Hubo dificultades, pero en comparación con el regreso a mi antigua vida, no fue tan complicado”.

Ella asintió para mostrar su comprensión.

A Nicole se le ocurrió de repente algo.

“¿También estabas en Wall Street en aquel entonces, Aida? Recuerdo que en los primeros años cuando Grant se hizo cargo de la compañía, iba para allá a menudo por negocios. Obviamente, no era lo suficientemente importante como para ir en persona, pero él nunca perdía la oportunidad de ir allí”.

Aida se sobresaltó un poco. Su expresión era claramente de sorpresa.

No lo sabía.

Nicole sonrió. “¿No te lo dijo? Creo que iba allá solo para verte en secreto…”.

“Pequeña N…”.

La voz de Grant se escuchó desde el piso superior, teñida de una advertencia inexplicablemente fría.

Clayton pareció darse cuenta de algo y sonrió de manera significativa.

Nicole parpadeó y miró a Grant, quien se acercaba.

“Hermano Mayor, ¿hiciste esos viajes de negocios en aquel entonces solo para poder ver a Aida?”.