La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 1385

En la evaluación integral del esquema óptimo de toda la carretera, el coche descartó la amenaza de rocas, baches y peligros ocultos de los vehículos tenía delante, así conduciendo de manera constante.

Nicole no estaba preocupada. Sabía que en términos de carreras, este coche no podía ganar.

Un coche de carreras era producto de la emoción por parte del corredor.

No era un producto de tecnología avanzada.

Incluso si obtuviera el primer lugar, ¿estaría feliz el corredor?

¿Sería su gloria o la gloria de la tecnología?

A Eric no le importaba. Su mente no estaba aquí.

Nicole levantó su taza para tomar un sorbo de café y levantó la vista, sintiendo de repente una mirada sobre ella.

Ella miró inconscientemente. Los ojos fríos y sombríos de Eric la miraban fijamente, tan complejos como un desastre en la noche, sin esconderse ni parpadear.

Nicole desvió la mirada con indiferencia y miró el video.

El coche estaba en modo de aceleramiento.

Tal vez calculaba que era el momento.

Por consiguiente, siguió dejando atrás a los otros vehículos.

Al principio, los otros coches no le prestaron atención a este coche discreto.

Después de todo, el corredor era un nombre del que nunca habían escuchado hablar antes, y este coche no tenía registros impresionantes. ¿De qué había que preocuparse?

Sin embargo, el coche fue llegando poco a poco al centro.

Las ventajas del coche quedaron plenamente demostradas.

Era estable, pero tenía energía para embestir. Tenía una gran sostenibilidad.

Frente a él solo quedaban dos coches. Si las cosas seguían así, lo más probable era que esos coches fueran rebasados.

Sin embargo, los pilotos de esos dos coches eran los ganadores constantes en la clasificación del campeonato.

Estaban compitiendo entre sí. Estaba claro que el corredor en la delantera era muy hábil. El coche era extremadamente flexible y podía afrontar perfectamente las curvas y los giros laterales.

El coche de atrás apenas conseguía mantener el ritmo.

La carretera por delante estaba a punto de converger en un carril estrecho.

El coche de atrás estaba desesperado por ganarle al coche de delante, pero no esperaba que el coche de delante acelerara de repente y entrara en la carretera estrecha.

Se quedó atrás.

Sin embargo, al segundo siguiente, una sombra negra pasó repentinamente por delante de sus ojos.

Se acabó.

El carril estrecho solo permitía el paso de un coche.

El primer y segundo lugar ya no le pertenecían.