Resumo de Capítulo 1423 Ve sola – Capítulo essencial de La Heredera Divorciada Billonaria por Internet
O capítulo Capítulo 1423 Ve sola é um dos momentos mais intensos da obra La Heredera Divorciada Billonaria, escrita por Internet. Com elementos marcantes do gênero Romance, esta parte da história revela conflitos profundos, revelações impactantes e mudanças decisivas nos personagens. Uma leitura imperdível para quem acompanha a trama.
Antes de que Nicole pudiera hablar, el hombre a un lado tosió fuertemente y expresó su disgusto.
Clayton tenía una sonrisa cortés en su rostro, pero no había felicidad en su expresión.
“Nicole ya tiene planes conmigo esta noche. Deberías ir sola, Señorita Quimbey...”.
Ridículo.
Clayton pensó: '¿Cómo se atreve a invitar a mi novia a salir con ídolos jóvenes frente a mí? ¡No debí darle esa tostada! ¡Hubiera sido mejor dárselo a los perros!’.
Yvette la miró con pesar y Nicole asintió.
"Está bien. La próxima vez entonces. Iré a probarlo primero. ¡Te llamaré si me va bien!”.
Los labios de Nicole se torcieron. Clayton ya no podía tolerarlo.
"Señorita Quimbey, ¿todavía no te vas? Nicole todavía tiene una reunión importante. Ella va a llegar tarde...".
Él señaló su reloj de un millón de dólares y la apresuró.
Yvette frunció los labios. "Señor Sloan, deberías postularte para ser el asistente de Nicole. ¡El trabajo de Logan te pertenece!”.
Clayton sonrió, ni servil ni dominante.
“¡Estaré esperando el día que Logan renuncie!”.
Yvette resopló y miró a Nicole.
“Él es tan controlador. Ya no tienes libertad. Ve y dale una lección. Ya me voy...".
Nicole no pudo evitar curvar las comisuras de su boca.
"Ve. ¡Llámame si pasa algo!”.
Yvette asintió. Después de comer hasta saciarse, ella se fue felizmente.
Nicole miró su espalda y suspiró.
Clayton la miró.
"La Señorita Quimbey tiene un corazón bastante grande. Ella no parece herida en absoluto”.
Nicole sonrió. “Ella siempre ha sido así. Incluso si está triste en su corazón, no lo mencionará por segunda vez. Ella perdió la compostura lo suficiente ayer, por lo que definitivamente levantará su espíritu hoy”.
Clayton se frotó el puente de la nariz para aliviar su cansancio y se rio entre dientes.
“En otras palabras, el Señor Moore tendrá que trabajar duro. La Señorita Quimbey es una persona lúcida. Ella no repetirá el mismo error, ¿verdad?”.
Nicole lo miró. “No, esta vez ella realmente no lo hará. No importa lo que haga Sean, Yvette nunca mirará atrás”.
Ella conocía a Yvette demasiado bien.
Siguiendo su línea de visión, Clayton también se congeló.
Sintió un destello momentáneo de confusión.
¿Por qué?
¿Por qué siempre aparecía Grant en momentos como estos?
Grant se paró frente al coche de Clayton. Su mirada era fría y hosca mientras miraba a las personas adentro sin la menor intención de evitarlos.
Él miraba a Clayton como si pudiera clavarle agujas con la mirada. Su rostro estaba oscuro y nublado.
Clayton frunció los labios. Sus cejas se tensaron ligeramente. Sin embargo, rápidamente se calmó y sonrió.
"¿Debería ir a saludarlo?".
Nicole asintió. Grant ya los vio, así que no podían irse así.
Los dos salieron del coche y Clayton asintió cortésmente. "Señor Stanton, encantado de verlo”.
Nicole se acercó. "Hermano Mayor, ¿por qué viniste a trabajar a esta hora?".
Ella frunció el ceño, desconcertada.
¡Grant no era el tipo de persona que llegaba tarde!
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