La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 1502

El coche se quedó en silencio durante un rato.

Yvette sintió que había un toque de cariño en las palabras de Lance.

¿Cuánto tiempo llevaban de conocerse?

¡Seguramente estaba alucinando!

En la oficina.

La sede de la compañía de la familia Sheldon no estaba aquí, pero debido a su fuerza y ​​reputación, ellos estaban en la calle comercial extremadamente cara, que no debía subestimarse.

Sin embargo, en comparación con su sede, había una marcada diferencia.

Lance caminó con Yvette hacia el elevador. Era la jornada de la tarde, por lo que había más gente y estaba más lleno.

Él estaba a punto de entrar cuando vio a Yvette parada detrás de él con una mirada de sorpresa.

Él frunció el ceño y jaló de ella hacia el elevador por el brazo.

Luego, entraron una docena de personas más. El elevador se llenó rápidamente.

Yvette no pudo evitar meterse en la esquina, sintiéndose extremadamente incómoda.

Lance se acercó en silencio. Cuando fue apretado por el cuerpo del hombre gordo frente a él, maldijo en secreto que realmente había elegido el lugar equivocado.

Sin embargo, este edificio comercial no tenía un elevador exclusivo para el presidente y a él no le importaban cosas tan triviales.

Era un placer para él tomar el elevador con su personal y no muchas personas lo reconocían.

Después de llegar finalmente al piso, los empleados fueron saliendo esporádicamente.

Solo Yvette y Lance quedaron en el elevador.

Yvette finalmente pudo respirar con tranquilidad.

Ella tenía mucho miedo de que pisaran sus botas de piel de oveja de alta costura.

Lance la miró con una mirada profunda.

"¿No estás acostumbrada?".

Aunque la familia Sheldon no podía compararse con la familia Quimbey, seguían siendo famosos.

En particular, parte de las acciones de capital que poseía la madre de Yvette provenían de compañías afiliadas al estado. Era una de las razones por la que los antecedentes de la familia Quimbey habían sido tan fuertes durante tanto tiempo.

La increíble Señorita Quimbey siempre había vivido una vida lujosa. Incluso cuando quería bajar por el elevador, alguien la ayudaba a presionar el botón.

¡Su mirada aterrorizada de hace un momento parecía que estaba a punto de morir de miedo!

Yvette levantó la vista, se congeló por un momento, se arregló el cabello desordenado detrás de las orejas y sonrió.

"No, simplemente no esperaba tanta gente".