La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 1699

Eric lo tenía claro. Esta vez vino preparado.

Eric acudió personalmente a Felix para que aceptara a regañadientes hacer la cirugía de Floyd.

Los pies de Nicole se detuvieron y su expresión cambió. Su mirada se volvió conflictiva.

Un rastro de dolor y tolerancia apareció en sus ojos.

Nicole estaba dispuesta a irse con Eric porque no podía ignorar la vida de Floyd.

Antes de que Eric pudiera alegrarse, Clayton se dio la vuelta con una sonrisa y sostuvo su mano con fuerza. Dijo en un tono que no era ni ligero ni fuerte: "¿Todavía tienes el descaro de amenazarla cuando te estás aprovechando de su situación difícil?".

La multitud podía ver la tensión entre los dos hombres que estaban enzarzados en una batalla silenciosa.

La multitud se quedó en silencio y quieta.

Esta escena captada en video parecería la pelea del siglo.

Eric se rio, un poco lascivamente, y dijo descaradamente: “Aprovecharme de las dificultades de alguien también depende de si tengo la capacidad para hacerlo. Después de todo, es inútil jugar la carta emocional. Todavía no sabemos quién reirá el último”.

Eric tenía la mayor carta de negociación en su mano.

Desde el principio, Eric nunca pensó que tuviera una oportunidad.

Sin embargo, esta oportunidad cayó en su regazo. ¿Cómo no iba a aprovecharla?

Eric pensó para sí mismo: 'Aunque sea desvergonzado o despreciable, mientras pueda empezar de nuevo con Nicole, puedo renunciar a cualquier cosa, incluso a mi vida'.

Ante esas palabras, los labios de Clayton se curvaron con desdén y miró a Eric con burla.

Luego, Clayton jaló la mano de Nicole y caminó hacia adelante.

“Solo espera y verás, Señor Ferguson. No te creas demasiado...”.

Nicole frunció los labios. Sentía que no podía controlarse en absoluto. Sabía muy bien que perder esta oportunidad podría traer consecuencias imprevisibles.

Sin embargo, no podía rechazar a Clayton.

Nicole simplemente no podía lastimar a alguien que era infinitamente tolerante con ella.

La mano de Clayton parecía tener un poder que le proporcionaba constantemente un suministro inagotable de apoyo y racionalidad.

Le permitió salir de la multitud con calma y firmeza.

“Hola, Señorita Stanton. Soy el subalterno del Profesor Phillip. Es el doctor que operó a su padre hace quince años. Mi nombre es Elio Cosenza”.

Elio simplemente sonrió y continuó: “Puede que usted no se acuerde de mí, pero yo sí me acuerdo de usted. Participé en esa cirugía hace quince años. Por desgracia, yo aún era muy joven, así que mi superior no me permitió ser el cirujano principal....”.

Los ojos sombríos de Nicole se iluminaron lentamente. Sentía que le escocían los ojos y que se le llenaban de lágrimas.

Ella miró a Clayton y jaló su mano con entusiasmo.

Clayton le dio unas palmaditas en el hombro y la tranquilizó con su voz.

“No te pongas muy emocional. Hablemos en el coche”.

Era como si una luz envolviera a Nicole, quien estaba desesperada.

Nicole se agachó para subir al coche y Elio le abrió paso. Clayton se sentó con gran consideración en el asiento del copiloto para que Nicole tuviera mucho espacio para hablar con Elio.

Sin embargo, antes de que pudieran irse, una figura sombría y severa de repente se paró frente a ellos.

El conductor se quedó atónito. "Señor Sloan...".