Leia Capítulo 1700 No la querías do romance La Heredera Divorciada Billonaria aqui. A série La Heredera Divorciada Billonaria, do gênero romances chineses, foi atualizada para Capítulo 1700 No la querías. Leia o romance completo em booktrk.com.
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La Heredera Divorciada Billonaria Capítulo 1700 No la querías
Capítulo 1700 No la querías
Era Eric. Aún no estaba dispuesto a dejarlo ir, así que persiguió a Nicole. Ella era claramente suya, así que ¿cómo iba a permitir que Clayton se la llevara?
Era solo un día. ¿Por qué se negaba a satisfacerlo?
Un escalofrío apareció en los ojos de Clayton. Sonrió y bajó lentamente la ventanilla.
A través de la abertura, Eric no podía ver nada más que a Clayton.
Clayton miró a Eric de manera burlona, sin ocultar su desprecio por él.
"Señor Ferguson, guárdate esos pensamientos despreciables y deja de hacerte ideas sobre mi mujer”.
"¿Tu mujer?".
El tono de Eric era frío y severo, y apretó los dientes.
'¡Bah! ¿Su mujer? ¡Que ridículo! ¡Nicole es claramente mía!’, pensó Eric.
Los ojos sombríos de Clayton se posaron en Eric. Parecía tener algo de compasión.
“Eric, afronta la realidad. Fuiste tú quien apartó a Nicole una y otra vez. Fuiste tú quien la abandonó. Ella no hizo nada para perjudicarte y nunca se quedará quieta solo para esperarte”.
“Clayton, ahórrate tus comentarios cínicos. ¡Tú me la robaste!”.
Eric bajó la voz y gruñó.
Sus venas saltaban en su frente, mostrando lo enojado que estaba.
En su corazón, también aumentaban sus celos.
Eric estaba celoso de Clayton. Más bien, había estado celoso de él desde el principio.
Simplemente no estaba dispuesto a creer que había perdido ante alguien que apareció de la nada. Eric no estaba dispuesto a creer que Nicole, quien siempre había estado dedicada a él, cayera en los brazos de otra persona.
¿Qué derecho tenía Clayton para denunciar su relación?
En el asiento trasero, Nicole estaba en silencio con una cara hosca.
No dijo una palabra.
Clayton solo la miró por el espejo retrovisor y se sintió aliviado.
Él sonrió.
“Cierto, yo me la robé, así que deja de pensar en ella. Si yo fuera tú, no tendría la cara de volver a presentarme ante ella”.
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