La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 172

Si Nicole estaba dispuesta a tener un matrimonio de conveniencia, no habría ocultado su identidad en primer lugar.

Lo que ella quería nunca fue un simple matrimonio.

El Viejo Amo Ferguson resopló fríamente: “¿Quieres ver cómo ella se junta con otro? ¿Qué tan grande sería esa pérdida para nuestra familia?”.

No había otra persona más adecuada para Nicole que Eric.

No importaba a quién Nicole elegiría en el futuro, la familia Ferguson se convertiría en el hazmerreír.

Para los Ferguson, eso era más malo que bueno.

Aunque al Viejo Amo Ferguson no le agradaba Nicole como persona, estaba dispuesto a dejar de lado sus prejuicios del pasado y aceptar a esta mujer debido a su poderosa familia que era una fuerza a tener en cuenta.

Cuando Eric escuchó esto, su expresión se puso rígida y complicada.

‘¿Ver cómo ella se junta con otra persona?’. Eric nunca había pensado en eso.

Aunque había muchos hombres alrededor de Nicole, nunca pensó que ella se casaría con alguno de ellos.

‘¿Y si Nicole se casara con otro…?’. En cuanto pensó en esto, las cejas de Eric se juntaron. Su rostro se tensó al instante.

La renuencia y la melancolía en su corazón eran muy evidentes.

‘¡De ninguna manera!’.

El Viejo Amo Ferguson miró fijamente a Eric con una expresión severa. “Si Nicole no está dispuesta a volver a casarse contigo, entonces solo nos queda sustituirla por otra persona. Puedes casarte con otra hija de una familia influyente que pueda hacerle competencia a Nicole. Solo así podremos contrarrestar la amenaza que supone la familia Stanton”.

Las cejas de Eric se fruncieron con más fuerza. Su complexión se volvió sombría y extremadamente molesta.

Inconscientemente detestaba esta terrible propuesta.

Eric miró a su abuelo con profunda frialdad y renuencia en sus ojos. “No, no necesito un matrimonio de conveniencia. No hace falta que te metas en mis asuntos con los Stanton. Yo me encargaré de eso”.

Su relación con Nicole estaba en un punto muerto, y él ni siquiera consideraría a otras mujeres.

Tras decir eso, Eric se dio la vuelta para marcharse sin esperar a que su abuelo reaccionara.

Ingrid había estado esperando abajo por el buen espectáculo, pero aparte del ruido de la taza rompiéndose cuando entró Eric, sorprendentemente no se escuchó nada más.

Tampoco se atrevía a subir a espiar.

En cuanto Eric bajó, Ingrid se apresuró a saludarle. “Hermano, Nicole es una bruja. Por ella te regañaron, ¿verdad? No deberías ser demasiado amable con ella. Si no, se volverá muy arrogante y pensará que nuestra familia es fácil de intimidar…”.

Eric entrecerró los ojos peligrosamente y tenían una frialdad inexplicable.

“Ingrid Ferguson, te he advertido muchas veces que no la provoques. Parece que todavía no te lo has metido en la cabeza, ¿eh?”.

Ingrid se sobresaltó y se asustó ante la mirada de Eric.

De repente, no sabía qué hacer. “Yo... yo no…”.

Parecía estar dormida porque su voz sonaba ronca.

“Aló, ¿quién es?”.

No había tensión entre ellos como cuando se encontraban durante el día, lo cual era muy raro.

“Soy yo”, respondió Eric.

Nicole pareció despertarse en cuanto lo escuchó. Su voz se volvió repentinamente fría. “¿Estás calculado el costo de la reparación? ¿Cuánto debo pagarte ahora?”.

Ella parecía muy dispuesta a cortar todos los lazos con él.

Los ojos de Eric se oscurecieron ligeramente. Su voz era fría mientras decía: “Número equivocado, lo siento”.

Nicole respiró hondo y maldijo entre dientes.. “¡¿Estás loco?!”.

Luego colgó la llamada, furiosa. ‘¿Suena tan íntegro cuando llama al número equivocado? ¿Lo hizo a propósito? ¡Qué molesto!’.

Después de que le colgaran, Eric se rio ligeramente y no se molestó por ello.

El Presidente de Corporación Ferguson, un hombre venerado en el círculo empresarial, ¿se alegraba realmente de que una mujer le colgara el teléfono?

Nadie se lo creería si se corriera la voz.