La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 2045

Clayton ayudó a Nicole a ponerse un pijama, la llevó a la cama de la sala y la cubrió con una fina sábana.

El doctor le realizó una revisión, respiró aliviado y miró a Clayton y Nicole significativamente.

"Señor Sloan, la Señorita Stanton está algo hipoglucémica. Ella estará bien. La razón principal por la que se siente así es porque ha estado sumergida durante demasiado tiempo y, mm... Estaba algo sobrecargada de trabajo, lo cual causó un suministro insuficiente de sangre al corazón. Entonces, es recomendable que se lo tome con calma…”.

El doctor lo dijo eufemísticamente, pero tanto Clayton como Nicole lo entendieron.

Nicole solo deseaba poder esconderse debajo de la sábana.

Clayton estaba muy tranquilo y miró casualmente a Nicole. Le dio las gracias al doctor y lo acompañó a la puerta.

No mucho después, alguien trajo una botella de bebida deportiva.

Clayton la agarró y se la entregó a Nicole.

"¿Necesitas que te alimente?".

Nicole parpadeó con sus ojos brillantes.

“¿Por qué no les explicaste antes? Qué vergüenza…".

Clayton suspiró profundamente. “¿Qué hay que explicar? Me siento mal porque obviamente no hice nada, pero me culparon sin razón. Incluso me asustaste…”.

Nicole hizo un puchero. “¡Yo soy la paciente!”.

Él la miró con una profunda sonrisa y dijo: "No te dejaría ir si no fueras una paciente... Abre la boca...".

Lo empujó con fiereza, pero la bebida ya estaba en su boca y era demasiado tarde para escupirla. Por lo tanto, solo podía tragarla. Nicole se llenó de energía al instante después de tomar un sorbo de la bebida deportiva.

Ella tenía una expresión indescriptible.

Clayton se rio. “¡Parece ser bastante efectivo! ¿Un sorbo es suficiente?”.

Nicole sabía que él hizo esto intencionalmente, pero no le importó ya que sentía que lo había tratado mal.

Ella volvió a acostarse sin el menor rastro de somnolencia.

Clayton todavía estaba sentado. Él tiró la botella dentro del basurero.

Nicole parpadeó. “Quiero comer mandarinas”.

Clayton hizo una pausa ya que no podía entender su repentino deseo.

Sin embargo, aún así sacó su teléfono con el ceño fruncido.

"¿La mandarina australiana que comes frecuentemente?".

Nicole sonrió. “Cualquiera regular puede ser. Solo quiero deshacerme de ese sabor a bebida deportiva en mi boca”.

Clayton se rio impotentemente.

"Espera aquí. Saldré a revisar”.

Si recordaba correctamente, parecía haber mandarinas en el vestíbulo.

El gerente saludó apresuradamente a Clayton cuando lo vio.

"Señor Sloan, ¿la Señorita Stanton está bien? Lamentamos mucho que esto haya sucedido hoy…”.

Clayton era una persona razonable. Después de todo, esto había sido su propia culpa.

“Es solo un nivel bajo de azúcar en la sangre. Solo necesita acostarse un rato. Las aguas termales son bastante buenas”.

“Me alegro de que estés satisfecho con nosotros. ¿Por qué quieres comer mandarinas? Estos son para los invitados de última hora. Señor Sloan, tengo algunas frutas importadas en mi oficina. Si quieres, ¿haré que alguien te lo lleve a tu sala?”.

Clayton sonrió y sopesó la mandarina en su mano.

"Está bien. No te molestes”.

"Entonces, por favor, llámame si necesitas algo más".

El gerente era muy ingenioso. Al ver que Clayton no estaba enojado y no se llevó a Nicole, el gerente sabía que el pequeño episodio anterior no fue gran cosa.

Clayton entró en la sala y el gerente no lo siguió.

Nicole estaba sentada con su teléfono. Cuando vio entrar a Clayton, dejó el teléfono a un lado y sonrió.

Clayton miró a Nicole y se sentó a su lado.

Él peló lentamente la mandarina. El jugo se exprimió y la fragancia de la mandarina infundió instantáneamente el aire.

Era refrescante, suculento, dulce y amargo.

Los dedos de Clayton eran nítidos y delgados. Después de abrirla, la cáscara de mandarina parecía una hermosa flor con pétalos parejos.

Él cortó una rebanada y la puso frente a la boca de Nicole.

"Come…".

Clayton fue a la oficina temprano en la mañana y no le encargó a nadie que despertara a Nicole.

Como resultado, Nicole fue despertada por la vibración de su teléfono temprano en la mañana.

Cuando Nicole contestó la llamada, escuchó la voz molesta de Yvette: “Señorita Stanton, ¿olvidaste recoger a tu mejor amiga del aeropuerto hoy? ¿Cómo puedes dejarme sola en el aeropuerto esperándote?”.

Nicole hizo una pausa por un momento y al instante se despertó.

“Espera… ¿Lance no te recogió?”.

Yvette tosió y se aclaró la garganta.

“Él regresó a la sede central por una emergencia, ¡pero ese no es el punto! ¡Un esposo y una mejor amiga son diferentes!”.

Nicole se rio. "De acuerdo. ¡Espera ahí! Te recogeré ahora mismo”.

Después de que Nicole terminó de hablar, llamó a Julie.

Julie también se sorprendió.

Todas estaban al tanto del temperamento de la Señorita Quimbey.

Veinte minutos después, Nicole recogió a Julie y se dirigieron al aeropuerto.

De hecho, solo le hubiera tomado veinte minutos a Yvette regresar sola, pero a ella le gustaba el ritual de que alguien la recogiera en el aeropuerto.

Nicole y Julie llegaron al aeropuerto a las 10:00 am.

Ellas llamaron a Yvette solo para saber que Yvette se aburrió esperándolas, entonces fue a la cancha de baloncesto cerca del aeropuerto para ver jugar a las personas.

Nicole y Julie buscaron durante mucho tiempo antes de ver la esbelta figura de Yvette de pie fuera de la cancha de baloncesto, apoyada en la barandilla y sonriendo mientras miraba a los sudorosos jóvenes que jugaban.

Ellas pensaron que Yvette perdería los estribos, por lo tanto, incluso inventaron excusas para explicar su tardanza.

Sin embargo, Yvette solo las miró a la ligera. Se molestó un poco cuando vio que estaban tan bien vestidas.

“Ambas se ven tan alegres y bonitas. ¡Ni siquiera tengo maquillaje!”.

Julie levantó las cejas y rápidamente dijo: "¡Eso es porque tú naciste hermosa!".

Nicole asintió repetidamente. "Sí, sí".

Yvette se rio.