La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 2122

Nicole miró a Clayton expectante.

"¿No es eso sospechoso?".

Clayton le acarició el cabello y sacudió la cabeza con impotencia.

“Estás siendo paranoica. Eso ocurrió hace más de un mes. ¿Quién hubiera pensado que Lance sería hospitalizado aquí?”.

Nicole hizo un puchero, sin palabras.

En el camino de regreso, la idea de Clayton hizo que Nicole se sintiera un poco mejor.

Nicole sonrió. Últimamente, ella había estado muy preocupada por lo que pasó con Yvette.

La Señorita Stanton era una mujer profesional de peso, sin embargo, dejó de lado todo su trabajo para cooperar con la investigación de la policía.

Sin embargo, todavía no había ningún resultado.

Aún no había indicios de cuáles eran los motivos de los perpetradores.

Al tercer día después de la desaparición de Yvette y la hospitalización de Lance, todavía no había progreso.

Clayton no estaba dispuesto a profundizar en este asunto, ni quería que Nicole profundizara en ello.

La razón principal fue porque Clayton ya se había dado cuenta de que este asunto involucraba el tráfico clandestino de drogas.

Clayton no quería meterse en esta área, especialmente no por Yvette, porque no valía la pena el riesgo.

Él solo quería estar junto a Nicole en paz.

Sin embargo, Nicole era demasiado generosa con Yvette, por lo tanto, Clayton no podía mantenerse completamente con los brazos cruzados. Clayton todavía actuaba de acuerdo con los deseos de Nicole a veces.

Clayton tenía la sensación de que los perpetradores no estaban tras él o Nicole, entonces, ¿por qué debería entrometerse en este asunto?

Nicole no durmió bien durante dos días. En ese momento, ella se apoyó contra el hombro de Clayton y se quedó dormida.

Clayton suspiró e instruyó al conductor en voz baja: "Conduce despacio y de manera estable".

"Sí, Señor".

La madre de Lance, Fiona, ya le había dicho a la madre de Yvette lo que sucedió.

La Señora Quimbey estaba pendiente de los movimientos de la policía mientras Fiona velaba por la seguridad de Lance.

Fiona simplemente salió a comprar algo, pero en ese momento su hijo casi perdió la vida nuevamente. Esto la hizo sentirse mentalmente agotada.

La Señora Quimbey vino rápidamente cuando escuchó lo que pasó.

Fiona estaba sentada afuera de la sala de emergencias mientras lloraba. Cuando vio que la Señora Quimbey se acercaba, se secó las lágrimas y dijo: “¿No te dije que estoy bien? ¿Por qué viniste?”.

La Señora Quimbey suspiró.

“¿Cómo puedo estar tranquila? ¿Dónde está la policía? ¿No tienen oficiales vigilando aquí? ¿Cómo pudo pasar esto?".

Fiona suspiró y se atragantó.

“Ellos dijeron que los oficiales vestidos de civiles estaban cambiando de turno y en ese momento vieron a un fugitivo, por lo tanto, abandonaron su puesto”.

La Señora Quimbey se veía furiosa.

"¡Eso es ridículo! ¡¿Cómo pudieron no dejar a alguien atrás para proteger a Lance?!”.

Fiona tomó la mano de su amiga.

"Olvídalo. El doctor salió hace un momento y dijo que lograron salvar a Lance. Si no se hubieran enterado pronto, la falta de oxígeno en el cerebro hubiera podido causar una parálisis en Lance”.

La Señora Quimbey tenía una expresión tensa y ansiosa.

“¡No sé a qué tipo de personas ofendió esa mocosa! No ha habido noticias de ella. Si no hubieras ido a visitarlos en la víspera de Año Nuevo…”.

Nadie hubiera sabido que Lance estaba herido en casa.

Fiona estaba desconsolada. Suspiró y trató de calmar a la Señora Quimbey.

“Aunque Yvette tiene una personalidad extravagante, en realidad es una persona burbujeante y no alborotadora. Ella no tiene nada que ver con el incidente de Lance. Ella también es una víctima y ​​aún se desconoce su paradero, ¡por lo tanto deja de regañarla!”.

La Señora Quimbey se veía agradecida y culpable.

“Siento pena con ustedes, ya que ella se casó con Lance”.

"¿De qué estás hablando? Yvette me agrada muchísimo. Ella no es pretenciosa y puedo ver lo duro que trabaja. Yvette y Lance planeaban pasar el resto de sus vidas juntos. Ahora lo más importante es encontrar a Yvette. Espero que no le haya pasado nada”.

"¿Le dijiste?", gritó Sean con frialdad, lo que hizo que Melissa se estremeciera de miedo.

Sus ojos estaban rojos como si fuera a comerse a alguien.

Melissa se quedó allí con una expresión desgarrada. Sus labios se pusieron blancos de miedo.

“Yo… yo no tenía la intención. Solo quería desarrollar una buena relación con la Señorita Quimbey”.

Los ojos de Sean estaban llenos de una ira indescriptible. Se sentía como si su máscara hubiera sido desgarrada y su lado más feo quedaba expuesto.

Él no quería eso.

Aparte de las lágrimas en los ojos altivos de Yvette, también había disgusto y odio por él.

Era como si estuviera mirando un cadáver podrido en una zanja apestosa.

Sean fue herido por Yvette.

Él miró a Melissa con indiferencia y no sintió lástima por ella.

"¡Fuera de aquí ahora!".

Melissa miró a Tate y Lex en busca de ayuda en un intento de pedirles que hablaran por ella.

Sin embargo, Lex no se atrevió a provocar a Sean en ese momento. Incluso si Lex no tuviera cerebro, no se atrevería a causar problemas en este momento.

Tate suspiró, miró a Melissa y dijo: “Melissa, te acompañaré hasta la salida”.

Melissa parecía arrepentida. Se mordió el labio inferior y volvió a mirar a Yvette, luego se secó las lágrimas de vergüenza y salió corriendo.

Lex también tuvo el tacto suficiente para perseguir a Melissa.

La sala de estar volvió a quedar en silencio.

Sean hizo todo lo posible por reprimir su ira. Sus ojos parpadearon cuando vio las marcas en el rostro de Yvette.

Sin embargo, la molestia en sus ojos desapareció rápidamente.

“No hay más nada que pueda decir ahora que lo sabes. Soy así ahora y hago todo tipo de maldades. ¿Estás satisfecha? No creas que no te voy a poner las manos encima, Yvette. ¡Para mí, no eres diferente de esas mujeres!”.