La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 2332

Eric colocó sus manos esbeltas y hermosas sobre el volante. Su expresión siempre era tranquila.

Él emitía una vibra indiferente y distante. Parecía sombrío y arrogante.

Mitchell, quien estaba a su lado, dudaba en hablar. Ellos todavía tenían que pasar un semáforo antes de llegar al Hotel Hilton.

Mitchell sostenía la tarjeta de invitación y no sabía qué decir.

"Presidente…".

Al ver que Mitchell no habló durante tanto tiempo, Eric lo miró con indiferencia.

Mitchell apretó los dientes y dijo: “Presidente, Clayton está de vuelta. La familia Stanton organizó este banquete para celebrar el centésimo día del nacimiento del segundo hijo de Grant y para anunciar el regreso de Clayton. ¿Por qué deberíamos unirnos a la diversión? Debe haber medios de comunicación presentes en esta ocasión. Si los medios exageran nuestra presencia, incurriremos en más pérdidas. ¿Por qué yo no entrego el regalo? Después podemos regresar”.

No importaba cuánto lo pensara, Mitchell sentía que era inapropiado que Eric apareciera en la fiesta.

Al principio, Mitchell también se mostraba extremadamente optimista acerca de Eric y Nicole.

Sin embargo, ya sea antes o después del matrimonio, Nicole y Eric simplemente no parecían tener chispa.

Su amor no fue correspondido y ellos se lastimaron mutuamente.

Si Clayton hubiera estado realmente muerto, entonces Eric podría tener algo de motivación y esperanza si perseveraba unos años más.

Sin embargo, Clayton regresó inesperadamente. Incluso un extraño como Mitchell podía darse cuenta claramente que Eric realmente no tendría suerte esta vez.

Aunque esta vez la familia Stanton envió una invitación a la familia Ferguson, probablemente lo hicieron por cortesía y no querían que Eric viniera.

Pero Eric fue después de que terminó de trabajar.

Después de que Mitchell terminó de hablar, notó el rostro severo de Eric e inmediatamente se dio cuenta de que había hablado demasiado.

Eric lo miró fijamente con una emoción surgiendo en sus ojos.

En el siguiente segundo, Mitchell levantó los ojos inconscientemente y de repente agrandó los ojos.

“Presidente, tenga cuidado…”.

Eric no se dio cuenta de que se pasó un semáforo rojo.

Al mismo tiempo, una mujer también estaba cruzando la calle.

"Bam…".

El coche chirrió hasta detenerse.

Ellos atropellaron a alguien.

La tez de Eric cambió ligeramente y su protuberante nuez de Adán se movió hacia arriba y abajo.

El rostro de Mitchell también se puso pálido. Él entró en pánico por un momento antes de abrir rápidamente la puerta y salir del coche.

Él se arrepintió de haber distraído a Eric mientras conducía.

Mitchell no esperaba que Eric, quien se veía tan tranquilo y callado, tuviera una reacción tan fuerte por sus palabras.

Mitchell caminó hacia la parte delantera del coche con una cara sombría.

“Presidente, esa mujer se desmayó y está sangrando mucho. Debería llevarla al hospital de inmediato y yo me ocuparé del resto aquí”.

Los ojos de Eric se oscurecieron ligeramente y sus pupilas se contrajeron.

Parecía haber un poco de alivio en sus ojos.

Sí, alivio.

Eric se estaba obligando a ir al banquete de la familia Stanton para enfrentarse a la realidad.

Ahora, había algo que lo detenía y no tenía que torturarse a sí mismo. Esto parecía la voluntad de Dios.

Sus pupilas oscuras parpadearon con una luz fría.

Mitchell se encargó de la situación rápidamente.

Ya era demasiado tarde para llamar a una ambulancia, entonces era mejor pedirle a Eric que llevara a la mujer al hospital de inmediato. Mitchell primero contactó al hospital antes de llamar a la policía.

Si este asunto no se manejaba adecuadamente, tendría un impacto fatal sobre la Corporación Ferguson.

Por lo tanto, Mitchell lidió con ello metódicamente y cargó a la mujer al coche.

Mitchell miró a Eric, tragó saliva y dijo: “Señor Ferguson, iré al hospital inmediatamente después de haber lidiado con este asunto. Por favor conduzca con cuidado".

Eric asintió. Él sabía lo que debía priorizarse. La vida humana era lo más importante, por lo tanto, no podía demorarse.

Mitchell se sintió un poco aliviado al ver alejarse el coche de Eric.

Eric no se atrevía a desviar su atención para mirar a la mujer en el asiento trasero. Parecía un poco nervioso también.

Cuando llegó al hospital, los doctores y enfermeras lo esperaban en la entrada.

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