La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 2333

La indiferencia y la ternura parecieron coexistir en el rostro de Eric, lo cual creó un contraste impactante.

Si la enfermera realmente hacía lo que Eric deseaba y le sacaba la sangre, él moriría.

Antes de que la enfermera se fuera, todavía estaba pensando por qué un hombre así renunciaría a su vida.

La sala de emergencias estuvo iluminada durante unas cinco horas.

Cuando Mitchell llegó, ya había ido a la estación de policía. Mitchell no fue el que manejaba y había cámaras que lo demostraban.

Aunque Eric había pasado la luz roja, Mitchell explicó que lo había distraído porque estaba hablando con Eric. Por lo tanto, sucedió algo inesperado.

Según las imágenes de vigilancia, su coche chocó contra la mujer, pero la mujer también corrió hacia la carretera antes de que se encendiera la luz verde para peatones. Luego, ella chocó contra su coche.

Eric también frenó a tiempo. Por lo tanto, la mujer cayó frente al coche y no voló por los aires.

Aunque no sabían por qué esa mujer estaba tan ensangrentada, Eric aún podía evitar cualquier responsabilidad legal.

El resto podía arreglarse en privado con esa mujer.

Mitchell llegó al hospital.

Era casi medianoche.

El viento afuera era muy frío y hacía temblar a las personas.

Mitchell también estaba completamente sobrio.

Nadie estaba en la puerta de la sala de emergencias.

Mitchell llamó a Eric y escuchó su tono de llamada desde la sala de al lado.

Por lo tanto, caminó hacia allá sorprendido.

Vio a Eric sentado en la silla con los ojos ligeramente cerrados. Las pestañas de Eric temblaban ligeramente y algunos cabellos de su frente estaban desordenados. Parecía un poco descuidado.

El rostro de Eric estaba tan pálido que Mitchell podía ver claramente sus vasos sanguíneos.

Eric no había detenido la sangre del orificio hecho por la aguja, por lo tanto, un poco de sangre se había acumulado y se secó allí.

Era una vista impactante.

Los ojos de Mitchell temblaban ligeramente y no se atrevía a despertar a Eric.

Aun así, el sonido de los pasos de Mitchell y el tono de llamada despertaron a Eric.

Eric abrió los ojos y lo miró con frialdad.

Mitchell hizo una pausa y luego inmediatamente dijo: “Presidente, me encargué de todo. Solo tenemos que esperar a que esta mujer se despierte para discutir la compensación. Si está cansado, puede regresar a casa para descansar primero. Me quedaré aquí".

Eric se pellizcó el puente de la nariz. Parecía serio.

“Ve a averiguar quién es esa mujer. ¿Tiene algún familiar?”.

"Sí, Señor".

Mitchell asintió.

La mujer llevaba un bolso con ella, entonces debería haber algo dentro que pudiera demostrar su identidad. También debería poder encontrar la información de contacto de sus familiares en su teléfono celular.

Eric no se molestó en hurgar en las cosas de la mujer, entonces no las tocó.

El bolso todavía estaba en el asiento trasero de su coche.

Mitchell se dio la vuelta y salió, topándose casualmente con algunas enfermeras que estaban saliendo.

Rápidamente, se acercó a ellas para saludarlas. “Disculpe, ¿cómo está la paciente?”.

El rostro de la enfermera estaba tenso. “La paciente dejó de sangrar, pero tiene una costilla rota y las cicatrices en su cuerpo necesitan tiempo para sanar. Afortunadamente, el caballero que vino con ella donó sangre a tiempo. De lo contrario, hubiera habido problemas mayores”.

"¿Donó sangre?".

Mitchell no podía creerlo.

“Sí, ese caballero realmente es amable y generoso. Él dijo que sacara cualquier cantidad necesaria con urgencia. ¿Él todavía está en la sala? Ya que perdió tanta sangre de una vez, podría sentir mareos e incomodidad. Fue una situación de emergencia la de hace un momento, entonces no lo pude cuidar. ¿Eres su amigo? Deberías darle una barra energética”.

Mientras la enfermera decía esto, vio a alguien detrás empujando a la paciente fuera de la sala de emergencias.

Ellos se quitaron del camino.

Mitchell tenía una expresión extraña en su rostro.

No sabía qué pensar.

Eric le donó sangre a una extraña. Probablemente no fue porque él era amable y generoso.

Era casi medianoche.

Había círculos oscuros debajo de los ojos cansados de Eric.

Mitchell entró.

“Presidente, ¿sabe a quién atropelló?”.

Eric levantó sus fríos ojos.

Mitchell no se atrevía a mantenerlo en suspenso y dijo: “Su nombre es Selena Nelson. Es la única nieta de Orville Nelson. Para salvar el negocio de la familia, Orville Nelson hizo arreglos para que ella se casara hace tres años con Derek Norton, un hombre adinerado de negocios. Luego, ella se fue del país. Ella acaba de regresar a Mediania este año y remodeló el viejo Bar Tattle a Bar Buenas Vibras. La familia Nelson no sabía sobre su regreso. No pude ponerme en contacto con Derek Norton por el momento. ¿Debería contactar a la familia Nelson?”.

Eric entrecerró los ojos. “¿Orville Nelson?”.

Él estaba muy familiarizado con esta persona porque Orville era bastante famoso en el pasado.

Era una lástima que su terquedad y rigidez se convirtieran en su perdición y la familia Nelson entró en decadencia desde entonces.

A pesar de que su nuevo yerno adinerado, Derek Norton, le brindó ayuda financiera, aún no pudo revertir la familia Nelson, la cual estaba decayendo.

Ahora, la familia Nelson básicamente no se consideraba parte de la clase alta.

De hecho, atropellar a Selena era mucho más problemático que si hubiera atropellado a otra persona.

Eric parecía irritado, pero pronto tomó una decisión.

“Ahora que está casada, deberíamos llamar a su esposo y discutir con él cuánto quieren como compensación cuando ella se despierte”.

Mitchell asintió.

El dinero era un asunto trivial. Más importante aún, tenían miedo de que la familia Nelson se aferrara a ellos.

Eric se puso de pie, sacó la aguja de su brazo y se arregló la ropa.

Su complexión se veía mucho mejor.

"Bueno. Puedes quedarte a esperar a que se despierte. Regresaré a casa para descansar”.

Mitchell asintió determinadamente.

"Descanse bien. No debería conducir. Le buscaré un conductor de reemplazo”.