La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 2549

Mitchell le envió un mensaje a Selena y le pidió que se quedara con Eric por un tiempo. Él iba a enviar a alguien para reemplazarla pronto.

Selena no quería irse.

Quería quedarse y cuidar a Eric personalmente.

Antes, ella se vio obligada a ayudar, pero ahora era diferente.

En apenas unas horas, su mentalidad cambió.

Selena miraba al hombre acostado en la cama con la mitad de la cara cubierta con gasa y sentía una amargura dolorosa en su corazón.

Las exquisitas cejas y ojos de Eric ya no estaban visibles. Solo quedaba esa cicatriz sangrienta.

Era posible que él no pudiera ver nada en el futuro.

Eric ya no sería tan orgulloso y extravagante, y algunas personas se burlarían de él por ser ciego.

Todo esto era su culpa.

Selena respiró profundamente.

Mitchell le pidió a alguien que le llevara comida, pero ella no comió cuando la recibió. Ella simplemente se sentó en la silla y miró a Eric.

Lo miraba detenidamente y recorría concienzudamente cada pulgada de su rostro.

Los huesos de la frente de Eric eran fríos y rígidos, lo cual lo hacía parecer inaccesible.

Sin embargo, él era de corazón suave. Él accedía si alguien le decía algunas palabras bonitas.

Eric no era un hombre malo. Simplemente no decía nada agradable.

Selena parpadeó. Ella lo conocía tan bien. ¿Por qué no estaba dispuesta a continuar con su relación?

Tal vez era por el deseo posesivo en su corazón que quería que Eric le perteneciera solo porque gustaba de él.

Ya que él gustaba de ella, también debería darle el mismo afecto.

Eso era solo lo justo.

Sin embargo, Selena olvidó que su relación no fue igualitaria desde un principio.

Por lo tanto, ella nunca miró su rostro serio detenidamente. Eso fue porque tenía miedo de que cuando lo mirara, él de repente abriera los ojos y viera a través de sus pensamientos.

Lo que más temía era ser tan humilde cuando gustaba de alguien.

Por lo tanto, ella prefirió renunciar a esta relación que enredarse en sus sentimientos.

Selena era una persona tan despreocupada y tranquila porque tenía miedo de perderlo todo.

No tenía nada más que autoestima.

Por eso ella no podía perderlo. No quería ser subestimada por la persona que le gustaba.

Selena no debió lastimarlo. Lo que dijo el día de la ruptura fue demasiado hiriente.

Ahora, se sentía como una villana atroz.

Selena respiró hondo, se levantó y fue al baño a buscar una toalla mojada para limpiar las manos de Eric.

Olvídalo. Ella nunca podría pagar la deuda que le debía en esta vida.

Era casi de noche. Afuera estaba completamente oscuro. De vez en cuando, se escuchaba el sonido de los coches que pasaban por la carretera.

Selena no tenía sueño en absoluto.

Ella pensó en muchas cosas esa noche.

Cuando estaba a su lado, era verdaderamente feliz, pero también se sentía inquieta.

Ella no quería pensarlo demasiado, pero la respiración constante del hombre a su lado la hacía estremecerse inexplicablemente.

Selena decidió no irse a pesar de que Eric perdiera los estribos cuando despertara y se diera cuenta de su estado crítico.

A la mañana siguiente, Mitchell vino a entregar el desayuno y mientras tanto preguntó sobre la situación de Eric.

Selena le contó aturdida. Mitchell asintió y fue a buscar al doctor de nuevo.

Cuando Mitchell regresó a la sala, Eric acababa de despertarse.

El rostro de Eric estaba sombrío y un poco desconcertado. Él quería levantarse de la cama, pero accidentalmente chocó contra el pie de la cama e hizo un sonido ahogado.

Su tez se puso pálida al instante, y luchó por ponerse de pie. Él no dijo una palabra.

Cuando Selena vio esto, le dolió el corazón.

Eric ni siquiera quería hablar porque tenía miedo de que los demás lo vieran como un desastre.

Sin embargo, todos lo vieron.

Selena se quedó en silencio por un momento. La culpa en su corazón aumentó.

Mitchell hizo una pausa, llamó a la puerta, entró y agarró el brazo de Eric.

Ante este pensamiento, Selena tomó aliento y empujó suavemente la puerta para abrirla y entrar.

Eric tenía un oído agudo y giró la cabeza ligeramente. Él dijo en un tono algo frío: “¿Eres la enfermera que contrató Mitchell? No puedes entrar sin mi permiso”.

Él siempre había rechazado que los extraños estuvieran a su alrededor.

Selena hizo una pausa pero aun así entró.

La expresión de Eric se tensó. Justo cuando estaba a punto de decir algo, Selena le puso la mano en el hombro.

"Soy yo".

Tan pronto como Selena habló, Eric se congeló por un momento. Rápidamente, él suavizó su expresión y se veía un poco más gentil.

"¿Estás aquí? ¿No te fuiste?”.

Eric estaba feliz.

Selena frunció los labios y respondió: “Eric, lo siento”.

Su disculpa era frágil e inútil. Ella sabía que disculparse después de cometer un error era hipócrita y repugnante.

Sin embargo, ella no sabía qué hacer ahora. ¿Cómo podría compensarlo?

Eric se despertó temprano en la mañana y aún recordaba pedirle a Mitchell que ayudara a Selena primero.

Eric sonrió y tomó su mano que estaba en su hombro. Su rostro frío y rígido se suavizó.

"Bueno, sé que no tenías la intención de hacer esto, así que no tienes que culparte a ti misma”.

No importaba lo enfadada que ella estuviera, podía abofetearlo para desahogar su ira.

Incluso si Selena tuviera malas intenciones, no sería tan mala como los accidentes provocados por Cindy que casi le quitaban la vida a Eric.

Selena no haría esto.

Ella no retiró la mano.

“Ya le dije a Mitchell que seré tu enfermera y te cuidaré hasta que te recuperes”.

Eric levantó un poco la barbilla. Las comisuras de sus labios se tensaron instantáneamente.

Parecía gratamente sorprendido por la noticia.

"Será difícil para ti, pero me alegra escuchar esto".