La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 283

Nicole estaba ligeramente aturdida. Su corazón se estremeció y sus ojos le ardían al instante. Rápidamente bajó la cabeza para ocultar sus emociones. ‘Eric…’.

Nicole sabía muy bien que si no fuera por Eric Ferguson, ella nunca habría tenido la oportunidad de sobrevivir.

Sin embargo, ¿cómo iba a pagarle por haberle salvado la vida?

El doctor se marchó tranquilamente y la habitación volvió a quedar en silencio.

Nicole sentía el pecho pesado, como una roca que la presionaba, dificultándole la respiración.

En este momento, Kai entró silenciosamente y suspiró aliviado al no ver a nadie más allí.

“¡Si no fuera por el hecho de que te salvaron, no habría aguantado a esos tontos! ¡Estos últimos días han sido tan asfixiantes!”, se quejó Kai.

Nicole se rio y preguntó: “¿Cómo están Papá, G y Mav?”.

Kai se acercó y le acarició el cabello.

“Mav está aquí en la cubierta. Si no fuera por él, todavía estaría dando vueltas por donde se estrelló tu avión, buscando literalmente una aguja en un pajar. Supongo que tener un alto coeficiente intelectual tiene sus ventajas…”.

Nicole no podía evitar soltar una carcajada. Se sentía muy aliviada. En el fondo, ella sabía que el único que podría encontrarla sería su segundo hermano.

En efecto, ¡él era el Gran Dios Maverick!

“G se encuentra bien. Papá está en el hospital, pero se está recuperando”.

Nicole se puso ansiosa al instante. “¿Está todo bien?”.

“¿Cómo puede estar todo bien? En los pocos días después de tu accidente de avión, ni siquiera pudimos encontrar un cuerpo ni nada. En un momento de angustia, ¡Papá incluso tuvo la intención de donar toda nuestra fortuna familiar!”.

…

Nicole levantó la mirada para mirar a Kai con asombro y preguntó cuidadosamente: “Dime que nuestra familia no está sin dinero, ¿verdad?”.

‘Oh no... ¿Podré seguir despilfarrando dinero en cosas?’, se preguntó Nicole para sus adentros.

Kai le dio una palmadita en el hombro y suspiró con fuerza. “No te preocupes, evité que eso ocurriera. ¡No dejaré que seas una m*ldita pobretona!”.

Nicole soltó un suspiro de alivio. ‘¡Qué bien!’.