La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 477

Teatro Gran Capital.

Nicole tenía entradas en primera fila.

Ella bajó del coche con un vestido de color claro. Aunque el diseño era conservador, la hacía verse alta y esbelta, con curvas en los lugares adecuados.

Nicole lo combinó con unos bonitos tacones de aguja. Su temperamento era brillante y destacado.

Logan había traído el vestido de la tienda y se lo pasó a Ivy para que se lo entregara a Nicole.

El teatro estaba rodeado de periodistas y fanáticos. Había una gran cantidad de personas.

Parecía que Kai, la superestrella, hacía realmente honor a su título.

Cuando Nicole bajó los escalones, se resbaló y se rompió el tacón de sus tacones de aguja.

Las cámaras de los periodistas no dejaban de emitir flashes por debajo. Si ella bajaba así, su extraño aspecto estaría sin duda en los titulares de mañana.

Nicole maldijo en secreto y se subió rápidamente en el coche.

Luca preguntó: “Señorita, ¿qué ocurre?”.

Nicole dijo: “El tacón de mi zapato está roto. Búscame un par de zapatos nuevos”.

Los ojos de Luca se abrieron de par en par en un dilema.

Ivy Harrison, quien estaba a su lado, se apresuró a hablar.

“Tengo aquí un par de tacones de repuesto que son más o menos de la misma talla que los suyos. Señorita Stanton, ¿por qué no se pone este par?”.

Nicole la miró en silencio.

Ivy mantuvo una sonrisa rígida y cuidadosa.

Nicole dijo: “Claro, gracias”.

De todos modos, no había otra opción. Si esperaba a tener sus zapatos nuevos, se retrasaría el estreno de la obra.

Lo bueno era que los tacones de repuesto eran nuevos. Aunque no eran de una marca de lujo, seguían siendo aceptables.

En cuanto salieron del coche, innumerables destellos de cámara rodearon a Nicole, más entusiasmados por ella que por una actriz pasando por la alfombra roja.

Nicole mantenía una postura elegante y una sonrisa decente. Cuando estaba a mitad de camino, la correa delantera de sus tacones se soltó de repente y se rompió.

Inconscientemente se agachó para arreglarla cuando de repente sintió un escalofrío por la espalda.

¡La cremallera del vestido se abrió!

El clima no era demasiado frío, pero seguía siendo ligeramente más fresco por la noche en comparación con el día.

Cuando Nicole se dio cuenta, su cuerpo se puso rígido.

Todo, desde los zapatos hasta el vestido, parecía un accidente, pero innumerables pensamientos pasaron por la mente de Nicole. Todos ellos apuntaban a Ivy.

Nicole tuvo la amabilidad de ofrecerle a Ivy esta oportunidad, pero Ivy era ingrata.

La cámara seguía destellando. Nicole sabía que en cuanto se pusiera de pie, alguien se daría cuenta inmediatamente de que su cremallera se había abierto.

Incluso podía sentir el aire frío que empezaba a invadir cada uno de sus poros de la cintura para arriba.