La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 585

La voz de Eric era seca y ronca, y su mirada estaba llena de impotencia. Realmente no podía pensar en ninguna forma de salvarse.

Estaba furioso al ver este desafortunado nuevo matrimonio que lo ponía en una posición injusta.

Sin embargo, más que eso, Eric tenía pánico.

Eric nunca se había arrodillado ante nadie desde que se había hecho adulto, pero si arrodillarse podía demostrar su sinceridad, estaba dispuesto a arrodillarse a los pies de ella.

Bajo la luz, los ojos de Nicole brillaban mientras miraba el escenario. Las palabras de Eric no la conmovieron en lo más mínimo.

Las comisuras de su boca se curvaron suavemente, con un ligero desprecio.

“No lo hagas. Solo acortará mi vida”.

¿Acaso él quería aliviar toda su tristeza con tan solo arrodillarse?

¡Que siga soñando!

Las palabras de Livia indudablemente cambiaron la actitud sobre un nuevo matrimonio en la dirección opuesta.

Keith estaba a un lado. A los ojos de los desconocidos, él era una escoria que debía ser vuelto añicos, pero la tristeza en sus ojos era muy intensa.

La gente estaba confundida. ¿Era de verdad o estaba actuando?

Keith pensó que podría volver a empezar una vida feliz, ¡pero inesperadamente se encontró con un callejón sin salida!

La pequeña campesina que solía ser tan servil y nunca se atrevía a expresar su opinión, se atrevió a presentarse y a provocar una escena como esta para vengarse de él.

Bien. ¡Muy bien!

En ese momento, Keith descubrió que no sabía nada sobre Livia.

Ni siquiera sabía que ella era abogada.

Los miembros de la familia Ludwig, quienes estaban a un lado, comenzaron a dirigir a los invitados fuera del salón de banquetes. Todos estaban demasiado avergonzados como para quedarse y ver el espectáculo, así que se fueron uno tras otro.

Inesperadamente, un niño pequeño saltó al escenario. Se veía tan lindo, inocente e inofensivo.

Fue al lado de Livia, tiró de su mano y la consoló dulcemente.

“Señorita, tiene que ser valiente. Eres muy bonita, así que seguro encontrarás a un hombre mejor. ¡Puedo presentarte a mi papi!”.

Ante esas palabras, algunas personas se interesaron por seguir mirando.

¿Realmente involucró a Eric Ferguson en esto?

Eso era como una bofetada en público.

No pudieron evitar mirar en dirección a Eric.

Todo su cuerpo estaba envuelto en la oscuridad, y sus ojos eran sombríos y fríos mientras trataba de controlar sus emociones.

Eric se dijo a sí mismo innumerables veces: 'No te enojes. ¡No puedes enfadarte con un niño!’.

Sin embargo, la frialdad que lo rodeaba delataba sus emociones actuales.

¡Era imposible no enfadarse!

Al ver esto, la familia Ludwig aceleró el proceso de desalojo del lugar.

Nicole se acercó a Livia y le tendió la mano al pequeño. "Ven aquí”.

El Pequeño Michael saltó alegremente a los brazos de Nicole. "Señora Bonita, ¿fue muy razonable lo que dije?".