La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 654

De alguna manera, Nicole sentía que el hecho de que Eric aceptara venir aquí era más misterioso.

El sistema se detuvo por un momento, obviamente no esperaba que Nicole hiciera esa solicitud.

En menos de diez segundos, alguien entró por la puerta.

Era Gerard Lichman.

Él miró a Nicole con una sonrisa de satisfacción. “De acuerdo con las reglas, no puedes, pero como eres la Presidenta Nicole Stanton, haremos una excepción”.

Nicole alzó las cejas y pensó: 'Supongo que basta con que uno de nosotros lo pruebe. No quiero ser un conejillo de indias...'.

Gerard chasqueó los dedos para reiniciar automáticamente el sistema. La pared frente a ellos se volvió lentamente transparente.

Nicole miró levemente a Gerard y curvó los labios. "Este material de la pared debe ser bastante costoso, ¿eh?”.

Gerard sonrió y bajó la voz. "Utilizamos materiales de la más alta calidad para que sea seguro".

Ella miró al hombre que estaba al otro lado de la pared. Sus ojos de águila examinaban el entorno.

El entorno en el que él se encontraba era luminoso, como la villa de los Jardines Imperiales.

Nicole no podía evitar fruncir el ceño.

En el siguiente segundo, la mirada del hombro cambió repentinamente para mirarlos a través de la pared.

El corazón de Nicole tembló mientras apretaba inconscientemente los puños. '¿Acaso puede verme?'.

Gerard la tranquilizó desde un lado. “Señorita Stanton, no te preocupes. Él no puede vernos, ni escucharnos”.

Nicole suspiró aliviada.

Ella miró con indiferencia a Gerard. "Puedes irte”.

Gerard se quedó estupefacto.

Nicole dijo: "¿Crees que Eric te dejará escapar si descubre que estás husmeando en su psique?".

"Pero tú también estás...".

Nicole se rio ligeramente. "No me preocupa".

Gerard frunció los labios. 'Claro… ¡Yo soy el que debería estar preocupado! Bien…'

Al instante perdió las ganas de husmear.

Gerard sonreía mientras se iba, y Nicole apartó levemente la mirada.

Nicole volvió inmediatamente a su expresión indiferente y tranquila y salió de la habitación con determinación sin mirar a Eric.

Gerard estaba apoyado contra la pared del lado opuesto, instruyendo a sus empleados en voz baja.

Cuando Nicole salió, Gerard se sorprendió un poco, luego las comisuras de sus labios se curvaron en una sonrisa juguetona.

"¿Qué viste?".

Nicole frunció los labios. "Si quieres saberlo, ve a verlo por ti mismo...".

"No tengo las agallas, pero ¿por qué saliste tan rápido?".

Nicole dijo: "No me interesaba seguir viéndolo".

Gerard dijo: “Tengo mucha curiosidad por saber quién está enredando al Señor Ferguson”.

Eric era un hombre muy intrépido, así que, ¿por quién se sentiría tan atormentado?

De hecho, Gerard ya tenía una vaga respuesta en mente, pero quería saber qué pensaba la mujer que tenía enfrente.

Nicole pensó de repente en el momento en que Eric gritó su nombre.

Su tono era frío. "No pude escuchar nada".