La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 815

Nicole ni siquiera se dio cuenta de esto. Tomó el bolso y llevó a Clayton adentro.

Mientras caminaban, Nicole introdujo a Clayton la situación actual del círculo de entretenimiento.

“Aunque no sé demasiado sobre este círculo, he oído que las autoridades han puesto sus ojos en la alta remuneración de las películas aquí. Así que algunos artistas no pueden subir demasiado sus precios. Pueden mejorar la calidad de la película o utilizar otros canales para transferir el dinero a los artistas. En resumen, este negocio sigue siendo arriesgado”.

Clayton asintió con la cabeza.

“También he oído hablar de esto. Unas cuantas estrellas famosas han fracasado anteriormente. Su imagen se derrumbó e incluso las películas en las que participaban fueron implicadas y no se transmitieron. Por eso he estado observando y esperando el momento adecuado”.

Nicole olvidó que Clayton era un verdadero inversionista.

Si realmente le interesara el mundo del espectáculo, él probablemente lo habría investigado hace tiempo. Parecía que la excusa de antes seguía siendo solo una excusa después de todo.

Por un momento, Nicole tuvo sentimientos encontrados y se sintió un poco decepcionada.

Clayton se dio cuenta del cambio de humor de Nicole y se quedó perplejo por un momento.

Pensó en su previa conversación y no sabía qué había dicho mal para que ella se sintiera de repente tan decepcionada.

Clayton preguntó tímidamente: “¿Hay alguna estrella famosa que te guste?”.

Nicole se quedó atónita y se apresuró a explicarse.

“No me gusta ninguna estrella. No soy una chica tonta que se deja seducir por el físico. ¡Soy una joven muy rica que quiere concentrarse en su carrera!”.

El elevador se quedó en silencio por un momento, y Clayton no podía evitar reírse. “Sí, puedo notarlo”.

Nicole vio que él se estaba riendo y se atragantó de repente. ‘¿Realmente puede notarlo? ¡Claramente está mintiendo! Olvídalo, ¡utilizaré los hechos para probarme a mí misma!’.

Ya no quería seguir hablando.

Cuando el elevador llegó, encontraron el salón designado y vieron a alguien que merodeaba afuera. La espalda de esa persona les resultaba algo familiar.

Nicole se acercó para echar un vistazo. ‘¿No es ese Keith Ludwig?’.

Keith, naturalmente, también la vio, así como a Clayton, quien estaba detrás de ella.

Su rostro era extraño y complicado. Retiró la mirada y miró a Nicole.

Miró fríamente al portero. “¿Es necesario decirlo tan abiertamente…?”.

El portero sintió miedo de Keith y retrocedió dos pasos con temor.

Nicole se rio. “¿A quién quieres asustar, Señor Ludwig? Entraremos primero”.

Después, ella volvió a mirar a Clayton. Por lo general, una dama era acompañada adentro por un caballero que la llevaba del brazo.

Nicole vaciló, pero Clayton ya había dado un paso adelante y le había extendido el brazo.

Como se trataba de etiqueta, Nicole no le dio mucha importancia.

Justo cuando estaban a punto de entrar, Keith los siguió por detrás y sonrió satisfactoriamente.

“Nicole, llévame adentro…”.

Keith preferiría sacarse los ojos que tener que quedarse fuera y ver cómo la pareja de adentro eran íntimos entre sí.