La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 900

El rostro de Ava palideció un poco.

Mitchell había visto una buena cantidad de personas y situaciones mientras trabajaba para Eric, así que lo que dijo era real.

'¿Acabo de arruinar mi propio futuro?'. El rostro de Ava estaba pálido mientras se daba la vuelta y se iba en trance.

Mitchell llamó a los guardaespaldas de abajo.

“Vigilen a esa mujer y no dejen que le pase nada cerca de la Corporación Ferguson. No hay necesidad de preocuparse por ella después de que salga del perímetro de nuestra oficina”.

Como un asistente calificado, él tenía que estar bien preparado para lo que pudiera suceder.

Todos los cabos sueltos tenían que estar bien atados.

Mitchell pensó: 'El Señor Ferguson estaba realmente miserable. Ofendió a la familia Ferguson por el bien de Nicole, pero al final, también la perdió.

Nicole, quien ya no estaba interesada en Eric, era mucho más fuerte de lo que ellos pensaban.

En cuanto Ava bajó, vio que su rival, Nash Jones, venía muy animado.

Cuando él la vio, incluso levantó la mano a modo de saludo, tan entusiasmado como podía estar.

“Ava, siempre estás un paso por delante de mí. No esperaba que también dejaras la compañía primero. Te deseo todo lo mejor en el futuro…”.

El rostro de Ava se puso rígido.

Nash sonrió y subió a grandes zancadas.

Si no fuera porque ella cortejaba el desastre, este puesto habría caído en sus manos.

Mitchell regresó a la oficina de Eric y vio sus facciones serenas y hermosas que eran extraordinariamente profundas en las sombras.

“Presidente, Nash Jones ya casi está aquí”.

El rostro de Eric era sombrío e indiferente. “Dale las cosas y haz que vaya directamente a su puesto”.

Significaba que él no quería verlo.

Mitchell asintió y llevó los últimos documentos de Internacional Cyndro a la puerta para esperar a Nash.

Después de despedir a Nash, Eric envió un mensaje posponiendo todos sus compromisos sociales de la tarde. No quería ver a nadie.

Mitchell solo suspiró aliviado cuando Keith tuvo el descaro de venir e invitar a Eric a beber.

......

Ian y Julie llegaron, y Nicole e Yvette salieron del bar.

Los cuatro planeaban ir a dar un paseo.

Ella le devolvió el teléfono a Julie.

Ian sonrió y tomó el teléfono satelital del coche, entregándoselo a Nicole.

“No te preocupes, ¡estoy completamente preparado!”.

Nicole sonrió y lo tomó, pero sus palabras de elogio se quedaron atrapadas en la punta de su lengua.

“¡No tiene batería! Carter, ¿hace cuánto tiempo que no lo cargas?”.

La expresión de Ian cambió. “Yo… lo olvidé. ¡La última vez que me fui de campamento fue hace seis meses!”.

Los ojos de las tres mujeres se clavaron en el cuerpo de Ian.

Ian frenó de repente. Antes de que Yvette pudiera abrir la boca para regañarlo, Nicole de repente notó algo.

"¡Está lloviendo!".

Todos miraron por la ventanilla del coche. Caían gotas de lluvia del tamaño de un frijol y salpicaban los cristales.

Yvette instó a Ian. "¿Qué esperas? ¡Regresemos! Es imposible ver una lluvia de meteoritos bajo la lluvia…”.

La cara de Ian se puso roja y luego blanca. Estaba en conflicto mientras decía. “Creo que… Nos hemos quedado sin gasolina…”.