La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 936

Además de salvar a Nicole dos veces por pura suerte, Eric realmente no podía imaginar qué podría gustarle de Clayton.

Era gratitud, no amor.

Él quería que Nicole se diera cuenta de esto. ¡No te dejes engañar por él solo por gratitud!

Nicole se quedó en silencio durante unos segundos antes de bajar la voz.

“Estoy con él porque sé qué tipo de persona es, pero no tengo que explicárselo a otras personas”.

La existencia del Pequeño Michael podía considerarse una mancha para Clayton.

Sin embargo, a Nicole nunca le importó. Ella solo sentía dolor en nombre de Clayton.

El puño de Eric se apretó y se aflojó.

Su voz era ronca. “Yo también puedo arriesgar mi vida por ti, Nicole…”.

Su tono era casi de súplica.

Los ojos de Nicole se movieron ligeramente mientras lo miraba con frialdad y seriedad.

"Señor Ferguson, se ha demostrado que no somos compatibles. Por favor, deja de perder tu tiempo conmigo. Espero que nuestra relación siga siendo solo de socios comerciales…”.

Mientras hablaba, Clayton no pudo contenerse más y se acercó. Él extendió la mano para colocarla sobre el hombro de ella, provocándole un ligero escalofrío.

“El conductor está aquí. ¿Nos vamos?".

Nicole asintió y pudo sentir la mirada fría y severa de Eric.

“Adiós, Señor Ferguson”.

"Te arrepentirás, Nicole".

Eric apretó los dientes mientras hablaba; su figura abatida y erguida era un poco despiadada.

Nicole frunció el ceño y no quiso decir más nada, pero Clayton no estaba dispuesto a irse así como así.

Clayton se dio la vuelta, sonrió y habló con voz fría y certera.

“No, no lo hará. Ella nunca lo hará”.

Clayton estaba decidido a dedicar su vida a ella. Él siempre la apreciaría y la amaría. Él no le daría la oportunidad de arrepentirse de su decisión.

Luego, antes de que Nicole pudiera reaccionar, Clayton la agarró y se fueron.

Cuando el conductor se detuvo frente a ellos, él abrió la puerta trasera para Nicole y la cerró cuando ella entró.

Él entró por el otro lado, aparentemente frío.