La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 989

Solo quedaron ellos dos en la habitación, pero Nicole apenas podía escuchar la respiración de Clayton.

Ella frunció los labios. Por alguna razón, sentía que le picaba la nariz.

Extendió la mano para tocar la frente de Clayton y comprobó que estaba caliente.

Justo cuando estaba a punto de retirar su mano, una mano la jaló de repente.

Nicole se sobresaltó.

La gran mano de él estaba caliente, al igual que la temperatura de su cuerpo.

A Nicole no le importó eso y se apresuró a acercarse a él. "¿Estás despierto?".

Su voz estaba teñida de cautela como si tuviera miedo de sobresaltarlo.

Clayton abrió su boca seca. Su voz era tan áspera como el papel de lija.

"¿Por qué estás aquí?".

Los ojos de Nicole se enrojecieron, estaba demasiado avergonzada para decir que solo se había acordado de venir porque él no la había contactado.

Ella frunció los labios. “Llamé a tu teléfono, pero el Pequeño Michael contestó y dijo que tenías fiebre…”.

Las comisuras de la boca de Clayton se curvaron en una sonrisa débil mientras la consolaba.

"No pasa nada. Siento haberte preocupado, pero... estoy muy feliz de que viniste a verme”.

“Llamaré al doctor para que venga. No te preocupes”.

Nicole lo consoló.

Clayton sonrió y no la detuvo.

Él se dio la vuelta y ella vio cómo cerraba los ojos como si no tuviera fuerzas para abrirlos.

Incluso si su corazón ya tenía una respuesta, pero aún así le preguntó.

"¿Quién te golpeó?".

Clayton se esforzó por abrir los ojos. Su mirada era cálida mientras la consolaba.

"Está bien. No fue su intención. Solo fue un ataque de ira…”.

“¿Acaso la ira hace que esté bien golpear a los demás? ¡No eres un saco de boxeo! ¿Quién fue?".

Clayton parecía muy en conflicto mientras dudaba.

Nicole se puso de pie. “¿Cuántos enemigos tienes aquí? O fue Isaac o fue Eric. Les preguntaré a ambos…”.

Clayton jaló rápidamente de su muñeca.

El rostro pálido de Clayton sonrió mientras un toque de frialdad aparecía de repente en su rostro.

“Porque él me odia, así que definitivamente tratará de usarte. No conoces a Isaac. Y no sabes que es capaz de hacer todo tipo de cosas despreciables y desvergonzadas, así que… no puedo correr ese riesgo”.

Por un momento, Nicole no podía decir nada.

Ella creía en sus palabras, pero el sentimiento de culpa también surgió en su corazón.

Al fin y al cabo, Clayton había sido herido por su culpa.

Ella suspiró. “No te preocupes por mí. Nadie se atreverá a tocarme en mi territorio”.

Sin embargo, Clayton fue implicado y golpeado. Eric no contuvo su fuerza en este golpe.

Él no dijo nada. Naturalmente, sabía que Nicole no entendería la crueldad de Isaac. No se podía especular sobre personas anormales con el proceso de pensamiento de una persona ordinaria.

Nicole se levantó y miró su reloj.

“El doctor debería estar aquí en unos minutos. Te traeré hielo para la cara”.

Clayton asintió y observó cómo ella, preocupada, se ponía a trabajar para él.

En un instante, una sonrisa profunda y tenue apareció en su rostro.

Valió la pena.