La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 988

Desde que establecieron su relación, Clayton contactaba constantemente a Nicole.

Le decía que comiera bien, que se acordara de descansar, que bebiera menos café...

A veces, cuando Nicole veía los mensajes, respondía. Sin embargo, cuando estaba ocupada, simplemente los ignoraba.

A pesar de eso, él nunca se enojaba. enviaba mensajes casi una vez cada cinco minutos.

En algún momento, ella se había acostumbrado a ello.

Nicole frunció el ceño al mirar el teléfono silencioso.

Cuando abrió su registro de mensajes, vio que sus conversaciones siempre comenzaban porque él las iniciaba.

Ella escribió algunas palabras en el chat. "¿Estás ocupado…?".

Al pensarlo, lo borró.

Era mejor llamarlo directamente.

Unos segundos después, la llamada fue contestada.

“Señorita Bonita, te extrañé mucho…”.

¡Era el dulce Pequeño Michael!

Nicole sonrió. “Yo también te extrañé. ¿Por qué contestaste el teléfono? ¿Dónde está tu papá?”.

El Pequeño Michael gruñó y habló vacilante.

“A Papi lo golpearon y ahora tiene fiebre. ¡Se va a morir!”.

Nicole se sorprendió e hizo una pausa, pensando que había escuchado mal.

"¿Fue golpeado?".

El Pequeño Michael dijo: "Mmmm... ¡Lo golpearon tan fuerte que casi dejó de respirar!".

El corazón de Nicole se aceleró. No era de extrañar que Clayton no se pusiera en contacto con ella en todo el día.

Ella inmediatamente entró en pánico y se culpó por no haber preguntado antes por su estado.

“¿Están en casa? Iré allá ahora mismo…”.

El Pequeño Michael estaba sentado junto a Clayton y trató de meterle una pastilla en la boca, pero no lo logró por más que lo intentara.

Nicole se acercó unos pasos y no pudo ocultar la preocupación en sus ojos.

Ella frunció el ceño al ver al hombre que yacía allí. Su rostro estaba débil y pálido, y sus labios parecían completamente desprovistos de sangre.

Lo más alarmante era que el lado derecho de su cara estaba ligeramente hinchado y de color rojo oscuro. Era un moretón de un puñetazo, y también había algunos rastros de sangre que no se habían limpiado en la comisura de su boca.

Era muy impactante.

Clayton siempre había sido una persona amable y gentil, como si una ráfaga de viento pudiera llevárselo.

El corazón de Nicole de repente se agitó. Ella detuvo la mano del Pequeño Michael para que no siguiera metiendole medicina en la boca a Clayton.

Estaba claro que sus labios habían sido torturados hasta quedar irreconocibles.

El Pequeño Michael la miró sorprendido y ella le hizo un gesto para que no hiciera ruido.

Luego, ella acarició la cabeza del Pequeño Michael. “Espera afuera. Revisaré a tu papi”.

El Pequeño Michael dudó por un momento antes de acceder.