La Heredera Revelada: El Camino del Poder romance Capítulo 163

Alberto no mostró ninguna emoción, como si no hubiera escuchado el cuestionamiento de Emilio, y se dirigió directamente al escritorio de Emilio.

—Director Marcano, disculpe la interrupción.

El tono de Alberto era rígido, sin rastro de disculpa alguna. —Me disculpo por mi comportamiento imprudente de hace un momento, pero el director Marcano no respondió al mensaje de nuestro presidente Gálvez para concertar una cita ayer, así que tuve que venir yo mismo. ¿Acaso el director Marcano no adivina el motivo de mi visita desde Nueva Granada?

Emilio miró a Alberto, maldiciendo en silencio la arrogancia de Joel, mientras mantenía una fachada de calma.

—Joel aún no es el presidente del Grupo Gálvez, ¿no? Decir eso ahora, Alberto, es un poco prematuro.

Alberto ignoró la burla de Emilio.

Sacó su celular del bolsillo, marcó el número de Joel y activó el altavoz.

—Presidente Gálvez, Emilio está frente a mí.

Del otro lado del teléfono, se escuchó la voz de Joel con un tono de risa. —Director Marcano, soy Joel. Espero que esté bien.

La falsa cordialidad de Joel estaba impregnada de una fuerte presión.

Emilio frunció el ceño, mirando fijamente a Alberto, pero sus palabras iban dirigidas a Joel al otro lado del celular. —Señor Gálvez, es usted muy amable.

Un simple título era suficiente para dejar claro el mensaje de Emilio.

Aún no reconocía a Joel como presidente del Grupo Gálvez.

¿Qué era eso de "presidente Gálvez"?

Joel guardó silencio por dos segundos y fue directo al grano.

—Director Marcano, no voy a andarme con rodeos. Hoy envié a Alberto personalmente porque quiero hablar con usted sobre el cinco por ciento de las acciones del Grupo Gálvez que posee. Estoy muy interesado en comprarlas directamente.

Si Joel realmente estaba dispuesto a ayudar...

El corazón de Emilio comenzó a flaquear.

—Director Marcano, piénselo bien.

Tras decir esto, Joel le dio instrucciones a Alberto. —Alberto, no le pongas demasiada presión al director Marcano. Busca un lugar donde quedarte y deja que el director Marcano lo piense bien.

—Entendido —respondió Alberto, colgando la llamada.

Se volvió hacia Emilio, diciendo sin expresión alguna. —Director Marcano, ya escuchó las palabras de nuestro presidente Gálvez. El futuro de Inversiones Mundiales Solaris depende de su decisión.

Dicho esto, Alberto se dio la vuelta y salió del despacho sin mirar atrás.

En la oficina solo quedó Emilio, con una expresión cambiante en su rostro.