La Heredera Revelada: El Camino del Poder romance Capítulo 164

Joel había lanzado una propuesta que se sentía tanto como un salvavidas como una espada colgando sobre su cabeza.

Sabía que realmente estaba acorralado, sin salida.

¡Joel estaba decididamente empujándolo al borde del precipicio!

Pero por el lado de Ismael...

La gratitud por su apoyo era algo que Emilio nunca podría olvidar.

Sin la confianza y ayuda inicial de Ismael, ¿cómo habría podido obtener el cinco por ciento de las acciones de Grupo Gálvez? ¿Y cómo habría podido, con el dinero de los dividendos de Grupo Gálvez, fundar Inversiones Mundiales Solaris?

Todo lo que ahora poseía, se lo debía a Ismael.

Sin embargo, ahora tenía que...

¡No, no podía traicionar a su benefactor!

Con estos pensamientos, Emilio recordó a Eduardo.

De cualquier modo, tenía que recuperar el dinero perdido en Grupo Narváez para tapar el agujero en Inversiones Mundiales Solaris.

Emilio volvió a llamar a Eduardo, y el teléfono sonó durante mucho tiempo antes de que contestara.

—¿Hola? ¿director Marcano? —la voz de Eduardo era rasposa y cansada, claramente agobiado por la inminente quiebra de Grupo Narváez.

—¡Eduardo, ¿cuándo me vas a devolver mi dinero?!

La voz de Emilio era como la de un león enfurecido, resonando dolorosamente en los oídos de Eduardo.

Eduardo suspiró resignado—. Director Marcano, ¡realmente estoy sin dinero!

—El proyecto ha perdido miles de millones, ahora la cadena de financiación está rota, Inversiones Mundiales Solaris va camino a la bancarrota, ¿y me dices que no tienes dinero?

La puerta del estudio se abrió y Mónica entró con un tazón de sopa de pollo, hablándole suavemente—. Papá, la sopa está lista, por favor tómatela.

—¿Papá?

El oído agudo de Emilio captó instantáneamente la voz femenina en el teléfono.

—¿Mónica? —su tono cambió, con un matiz de curiosidad y esperanza—. ¿Es tu hija Mónica?

Eduardo se quedó rígido, tartamudeando—. Sí... sí, es Moni, ella... vino a verme.

—Mónica... —Emilio repitió el nombre para sí mismo, su mente trabajando rápidamente.

Mónica, la prometida de Liam, la familia Olivera...

De repente, Emilio se dio cuenta, como si hubiera encontrado su última esperanza, y su tono se volvió urgente—. Eduardo, dime, ¿Mónica tiene un compromiso con ese señor Liam de la familia Olivera?