La Reina Top tras su Renacimiento romance Capítulo 27

El jefe de la familia Mora de Montebellola.

Los Mora eran la familia más poderosa de las cuatro grandes, ni los Santos les llegaban a los talones.

Vanessa quitó la mirada, agarró una aguja de plata y apuntó a los puntos de acupuntura del abuelo Mora.

El tipo se apuró a detenerla: "¿Vas a hacer acupuntura?".

Se veía incredibilidad y desconfianza en los ojos, después de todo, Vanessa parecía demasiado joven.

"¿Eres estudiante de medicina en la Universidad San Cascada? ¿Estás segura de lo que haces?".

No quería dejar que Vanessa le clavara las agujas así como así.

Vanessa volteó la cabeza, sus ojos claros no mostraron emoción: "Ahora tengo un ochenta por ciento de seguridad, si pierdes un segundo, él correrá más peligro".

"Pero...".

El hombre estaba nervioso, ya había llamado a un doctor, pero el abuelo Mora se había puesto mal de repente y el médico tardaría en llegar.

Interrumpir a un médico mientras salvaba una vida era de mala suerte, y Vanessa no estaba para tonterías, se le enfrió la voz: "Salvarlo o no depende de ti, pero te digo, si no lo tratas ahora, no le quedará más de cinco minutos de vida".

El hombre miró al abuelo Mora, luego a Vanessa y algo en la mirada tranquila y clara de la chica le dio un poco de paz. Decidió jugársela, se levantó y se inclinó noventa grados ante Vanessa: "Señorita, perdona si te ofendí, estaba desesperado. Por favor, haz todo lo posible por salvarlo, te lo compensaré luego".

Vanessa suavizó su expresión y con un simple "bueno" sacó la aguja de plata y la clavó rápida y precisamente en los puntos de acupuntura.

El hombre vio cómo lo hizo y se impresionó.

Aunque no era médico, había visto a otros hacer acupuntura, y a pesar de la edad joven de la chica, tenía un toque que muchos médicos tradicionales no lograban.

¡¿Quién diría que en San Cascada hubiera alguien así?!

"¡Puf!".

De repente, el abuelo Mora tosió sangre.

"¡Jefe!". El hombre se asustó.

Verifica el captcha para leer el contenidoVerificar