La Traición en Vísperas de la Boda romance Capítulo 369

Joaquín, al ver que Cecilia tenía los ojos llenos de lágrimas, bajó la guardia. Con un gesto suave, limpió la humedad que asomaba en la comisura de sus ojos.

—Cecilia, desde el principio, cuando decidiste estar conmigo, dejamos las cosas claras. No quiero que pierdas la cabeza justo ahora, cuando más debemos mantenernos firmes.

Cecilia bajó la mirada, incapaz de ocultar la tristeza que la invadía.

Cuando comenzó su relación con Joaquín, él fue directo: sin importar lo que pasara entre ellos, jamás debía llegar el escándalo a oídos de Petra.

Para compensar lo que le debía, Joaquín le prometió ofrecerle la mejor vida posible y poner sus bienes bajo su administración.

Durante todo este tiempo, Joaquín cumplió su palabra. Nunca la hizo pasar necesidades, siempre se aseguró de que no le faltara nada.

Cecilia aceptó ese trato; al inicio, le pareció suficiente. Pero con la llegada inesperada de Renata, todo se volvió un caos.

La noticia de que Petra planeaba separarse de Joaquín despertó en Cecilia una esperanza que nunca se atrevió a confesar: ¿sería posible ocupar ese lugar?

Pero Joaquín jamás tuvo la intención de dejar a Petra. Ni siquiera imaginaba hacer pública su relación con Cecilia.

—Joaquín…

Cecilia levantó la vista. Las lágrimas, que apenas contenía, terminaron por deslizarse por sus mejillas.

—¿De verdad no puedes separarte de Petra?

Petra ya lo había expuesto en la reunión de exalumnos, lo había tratado con total desdén.

Y aun así, él se negaba a dejarla.

Joaquín frunció el ceño, y su actitud se volvió áspera. Se alejó un poco, fue hasta su silla de oficina y se sentó, lanzándole una mirada punzante.

—Cecilia, lo tuyo es puro capricho.

Ya no pudo controlar el llanto. Las lágrimas rodaron por su cara, sin freno.

—No es capricho. Es Petra la que quiere separarse de ti. Si ella ya no te quiere, entonces ¿por qué…?

Joaquín la interrumpió de inmediato, molesto.

—Petra no va a separarse de mí. Solo está molesta, nada más. Ya verás, cuando pase el enojo, volverá a mi lado.

Apoyó los pies en la orilla de la silla, se recargó con tranquilidad y movió los pies con aire despreocupado.

—Muy pronto, Petra tendrá problemas mucho más grandes de los que preocuparse. No va a tener tiempo ni cabeza para Nexus Dynamics.

—Aprovecha este tiempo para resolver todo lo que quedó pendiente.

Joaquín ya sabía, por Catalina, cuál era la situación actual de Grupo Calvo.

Ahora mismo, aparte de Jimena Calvo, nadie más le importaba tanto a Petra.

Si algo le pasaba a Grupo Calvo o a Jimena, Petra dejaría de fijarse en lo que pasaba con Nexus Dynamics.

Cuando por fin se diera cuenta, ellos ya habrían limpiado todo el desastre anterior.

Petra no descubriría nada. Y aunque llegara a sospechar, no tendría pruebas.

Ver la seguridad de Joaquín tranquilizó el ánimo de Cecilia, que hasta hace un momento estaba hecha un manojo de nervios.

Recordó entonces que Catalina había venido esa misma mañana a platicar a solas con Joaquín, y no pudo evitar preguntar...