La Traición en Vísperas de la Boda romance Capítulo 445

Al final, Benjamín Hurtado no le marcó a Jimena Calvo, sino que dejó el asunto en manos de su asistente en el país.

El asistente era sumamente eficiente: no tardó nada en comunicarse con la familia Calvo. Después de preguntar por el estado de Petra Calvo, le devolvió la llamada a Benjamín.

—La familia Calvo comentó que la señorita Petra hoy trabajó demasiado, así que después de cenar se fue a descansar temprano a su cuarto.

—Entiendo —respondió Benjamín con voz distante, y colgó de inmediato.

Baltasar Sandoval estaba acostado en la cama de hospital. Se movió con dificultad, y tras dudar un momento, habló.

—Oye, primo, las relaciones no son un juego donde siempre hay un ganador y un perdedor.

Benjamín no contestó. Sus ojos oscuros, profundos e impenetrables, no dejaban entrever la menor emoción.

Baltasar abrió la boca, queriendo decir algo más, pero Benjamín ya se había levantado de la silla.

Baltasar, por reflejo, alzó la mano para cubrirse la cara.

—No vayas a golpearme la cara, ¿eh?

Benjamín lo miró como si fuera un caso perdido y soltó en tono grave:

—Descansa. Yo me voy.

Baltasar dejó escapar un suspiro y murmuró en voz baja:

—Pensé que ibas a golpear a un paciente herido...

Benjamín lo miró desde arriba, con cierto desdén, y soltó una carcajada seca.

—Cuando estabas entero, ni así eras rival para mí. ¿Crees que aprovecharía ahora que estás débil?

Un golpe directo, sin filtros.

Baltasar, por dentro, le dedicó a Benjamín una seña de burla imaginaria.

...

Petra durmió toda la noche y despertó hasta que la luz del amanecer se colaba por las cortinas. Tomó su celular de la mesita, y al revisar las notificaciones, vio que Benjamín le había llamado después de que se fue a dormir. Se quedó unos segundos mirando la pantalla, en silencio.