Si, aceptó ser su esposa sustituta señor parrow romance Capítulo 6

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—señor...— susurra ella tan perfecto, que literalmente provoco pensamientos oscuros a Sebastián

Ella cierra los ojos, y lo peor es que él puede escuchar la respiración pausada de ella.

Sebastian sigue subiendo y al tocar la parte herida, ella se queja.

—debiste decirlo a tiempo, se van a formar vejigas, lo mejor es que te lleve a casa— dijo él tocando con delicadeza, pero la quemadura esta un poco más arriba, casi llegando a la intimidad de la chica

—señor... Pare por favor— súplica aún con sus ojos cerrados, y pasa saliva. Ningún hombre la había provocado tanto como Sebastián Parrow.

Por la forma en que ella le suplico, Sebastián se siente inquieto, retira su mano y retoma su compostura.

la respiración de Anastasia es agitada, ella no es capaz de mirarlo a los ojos, sus mejillas están sonrojadas.

El ambiente se puso algo tenso, por lo que al llegar Leandro, fue perfecto.

—compre la mejor, debes limpiar la quemadura y luego aplicar dos veces al día hacer el mismo proceso— Leandro le entre la crema a Anastasia

—señor muchísimas gracias— le agradece a Sebastián, pero este no le responde nada, está tan serio, que su mirada es muy fría y despiadada

Ella suspira, y mira a Leandro —gracias señor Leandro

—descuida solo debes cuidarte ¿Jefe la llevo a casa o seguimos la ruta?

—señor yo estoy bien, por favor lleven con usted— pidió Anastasia

—a la empresa— ordena Sebastián

Anastasia pasa saliva, quiere serle útil a Sebastián para que él le entregué el dinero que ella necesita para el tratamiento de su madre.

Al llegar a la empresa, es algo lejano, y lo lindo es el campo que le rodea, la cosecha para el vino, largas hectáreas y muchos trabajadores.

Leandro estaciona, Sebastián ya sabe que han llegado.

—Leandro ya sabes lo que debes hacer— habla en clave Sebastián y este asiente

—si necesitas algo me informas, aunque creo que con Anastasia será suficiente de ahora en adelante, un permiso— Leandro mira a Anastasia y luego le sonríe con amabilidad

La chica se quedó por un momento observándolo, cuando volteo a mirar a Sebastián, este no estaba, ya había dado unos pasos, la chica corre detrás de él y al estar cerca.

—si tanto te gusta, te hubieras ido con él— habla con arrogancia Sebastián

—no me gusta el señor Leandro

—si es así, no me importa— responde él de mal genio

—señor para ser usted tan guapo es muy amargo— habla ella con sinceridad y Sebastián se detiene

—¿No puedes cerrar la boca? ¿Eres así, todo el tiempo hablando?— pregunta él y ella baja su mirada

—perdone señor Parrow, hablaré si es necesario

Sebastian Parrow hace un gesto de desagrado y luego continua su camino, al entrar a la empresa, Anastasia está impactada, todo es tan organizado, los empleados bien vestidos y educados, los vinos que están en exhibición, los cuales son los éxitos de la familia Parrow, ella siente intriga por saber más, pero Sebastián continúa su camino.

Ella se asombra al ver como los empleados le abren paso a Sebastián, y lo miran con temor, Sebastián tuvo que aprender a mentalizarse donde queda su oficina para ser más independiente, mostrar seguridad a sus empleados para que luego por su incapacidad no quieran pasar por encima de él.

Al llegar abre la puerta y ingresa, luego Anastasia.

—el baño es la puerta marrón, ingresa y haz lo que debes hacer, no tardes ¿Entendido?

—si, si señor— responde ella y camina rápido al baño

Mientras Sebastián toma asiento y espera impaciente.

Al salir Anastasia, siente un gran alivio, por fin, puede al menos caminar sin tanto ardor, aunque ella es muy fuerte, y podía soportarlo por más tiempo.

—estoy lista señor, ¿Que tengo qué hacer?— pregunta ella poniendo buena actitud

Tocan la puerta, Anastasia voltea a mirar.

—adelante— habla con voz de mando Sebastián

—buenos días señor Parrow— saluda su secretaria, la mujer es hermosa

Anastasia se hace a un lado, para no ser un impedimento en la conversación.

—¿Caseres cómo va la fermentación maloláctica de vino blanco?

—si señor, el vino blanco está de maravilla, pero también ya está listo el de sabor a manzana, tenemos los dos disponibles para que usted apruebe cuál será el exclusivo de la empresa señor Parrow— Caseres se expresa con elegancia y profesionalismo, por lo tanto no ha mirado para nada a Anastasia