Sin Reconciliación, me Casé con un Magnate romance Capítulo 296

Resumo de Capítulo 296 : Sin Reconciliación, me Casé con un Magnate

Resumo do capítulo Capítulo 296 de Sin Reconciliación, me Casé con un Magnate

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Vicente se sintió confundido por un momento: —No era eso lo que quise decir.

Él realmente quería hacer algo significativo.

Alicia tomó el micrófono, mirando a los presentes y dijo: —Yo realmente fui parte de la familia García, pero ya no lo soy. Mis seguidores deberían saber que no tengo una buena relación con mi familia. Aquí lo aclaro una vez más, ¡no tengo ninguna relación con la familia García!

Vicente, al escuchar las palabras de Alicia, se sintió muy dolido, pero no supo qué decir.

María, aprovechando la situación, intervino: —Alicia, Vicente tenía buenas intenciones, ¿por qué lo avergüenzas públicamente? No sabes cuánto te envidio.

Una compañera de Alicia, de manera burlona, le dijo a María: —María, claramente solo eres la hija de un conductor y sin embargo pudiste estudiar en la escuela de negocios, ocupando el lugar de alguien más, ¿no es obvio?

—Exactamente, que la hija de un conductor pueda estudiar aquí muestra cuán parcial ha sido siempre la situación.

—Con tal parcialidad, no es de extrañar que FuegoEterno quisiera cortar lazos con su familia. Yo haría lo mismo.

María quedó sin palabras ante la réplica y miró a Vicente buscando ayuda: —Vicente, no quise decir eso, solo estaba tratando de mediar con Alicia por ti.

—No necesito tu mediación, ¡cierra esa boca que solo busca crear discordia!

Vicente esta vez no cayó en la trampa de María: —Si Alicia no me respeta, es mi culpa, no puedo culpar a nadie más.

María, incrédula ante las palabras de Vicente, pensó para sí misma:

Extraño, antes cuando decía eso, siempre funcionaba.

¿Cómo es que Alicia puede ser tan directa y Vicente realmente no tiene ninguna queja hacia ella?

Vicente se giró y bajó del escenario, María lo siguió, sintiéndose algo perturbada.

Lucía quedó sola en el escenario.

Alicia levantó una ceja y miró a Lucía, quien, asustada, giró y corrió, temiendo ser castigada nuevamente por Alicia.

Una compañera de Alicia dijo: —A pesar de los pequeños conflictos, la votación continúa.

Al final, Alicia recibió muchos votos y fue elegida capitana con una gran mayoría.

Todos celebraron a su alrededor, su popularidad era evidente.

Pero no pasó mucho tiempo antes de que la gente de la familia Mendoza viniera a buscarla.

Lucía se levantó bruscamente y se fue sin mirar atrás.

Alicia miró al abogado con una sonrisa burlona: —Les doy un día para considerarlo, soy bastante razonable.

—Señorita Alicia, necesito reportar esto, pero si insistes en enfrentarte a la familia Mendoza, retiraremos la inversión del equipo, piénsalo bien.

Después de que el abogado se fue, Alicia reflexionó sobre la situación.

La única compañía que conocía y que podría patrocinar era Grupo Andes.

Después de pensarlo, Alicia envió un mensaje a Valentín: [Señor Valentín, ¿tiene tiempo para cenar juntos?]

Valentín, sorprendido por el mensaje, levantó la vista.

Miró a Roberto y dijo: —¿Has estado en contacto con Alicia últimamente?

Roberto, que estaba revisando unos documentos, frunció el ceño profundamente: —No.

—Pero ella acaba de enviarme un mensaje invitándome a cenar.

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