Sin Reconciliación, me Casé con un Magnate romance Capítulo 513

Resumo de Capítulo 513 : Sin Reconciliación, me Casé con un Magnate

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Alicia notó la falta de compostura de la dama frente a ella: —Sí, de hecho, soy parte de la familia García.

Teresa preguntó: —¿Jorge es su hermano?

Alicia asintió, aunque realmente no quería admitirlo, pero debido a la presencia de María, no tuvo más opción que asentir.

Teresa se quedó entre risas y lágrimas.

¡La chica que le gustaba a Roberto era la sobreviviente de aquel accidente de carro!

¡Qué destino más irónico!

Alicia rápidamente la sostuvo: —¿Qué le pasa?

María, hinchada de ira, dijo: —Alicia, ¿no te dije que trajeras de vuelta los postres que se habían retirado? Aún tengo que atender a la señora Paula, ¡no tengo tiempo de hacerlo personalmente!

Alicia, ignorando a María, ayudó a Teresa a levantarse: —La llevaré al salón para que descanse un poco.

—Alicia, ¿estás sorda? ¡La señora Paula es nuestra invitada de honor hoy!

Alicia empujó a María: —Apártate.

María cayó al suelo, se levantó de un salto y fue a quejarse a Jorge; esta vez, Alicia estaba realmente en problemas.

Después de todo, Jorge también valoraba mucho mantener una buena relación con la señora Paula.

Mientras tanto, Alicia ayudó a la señora Teresa a llegar al salón.

Ella rápidamente sirvió un vaso de agua caliente: —¿Seguro que no necesita ir al hospital?

—No es necesario, solo es un poco de hipoglucemia.

Teresa inventó una excusa al azar, su corazón estaba increíblemente agitado, no podía calmarse.

No esperaba volver a encontrarse con la familia del accidente de aquel año.

Y menos aún esperaba que la chica que le gustaba a Roberto fuera una de esa familia.

Alicia rápidamente trajo algunos dulces y los puso en la mesa: —Puede comer algo para sentirse mejor.

—¿Cómo es eso posible?

Teresa de repente recordó la última vez que se encontró con Alicia en el hospital, sí, recordó los rumores sobre Alicia.

La última vez que Alicia estuvo en el hospital fue porque su hermano la había golpeado, causando un gran escándalo.

En ese momento, Teresa pensó que las relaciones familiares de ella eran muy complicadas, pero no imaginó que fuera así.

Teresa se sintió triste por un momento: —¿Entonces ha tenido dificultades todos estos años?

—Eso ya es cosa del pasado.

Alicia apenas terminó de hablar cuando oyó voces fuera, probablemente Jorge había llegado.

Se levantó: —Descanse un momento, yo tengo que salir a atender unas cosas.

Alicia salió del salón de descanso y justo vio a Jorge y a María acercándose.

María atacó primero: —Jorge, no te mentí, aquí está Alicia holgazaneando, le pedí que trajera los postres favoritos de la señora Paula y se negó. Al final, la señora Paula se molestó, sintiendo que nuestro evento era muy pobre, como si fuéramos mendigos pidiendo limosna.

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