Ten cuidado, mi papá CEO romance Capítulo 147

Luego, ella escuchó al anfitrión anunciar: “Diseñadora Jeans, por favor suba al escenario. Esta noche será la pareja de baile del Presidente Zachary. ¡Felicitaciones!”.

Los aplausos resonaron en todo el salón de baile. Sharon recuperó algo de su estado de alerta, pero eso solo la sorprendió aún más. ¿Desde cuándo se había convertido en la pareja de baile de Simon? Ella ni siquiera había participado en el sorteo. ¿Ella cómo pudo haber sido elegida cuando ni siquiera tenía un número?

Ella se volteó y miró a Simon que estaba parado en el escenario. Había una multitud entre ellos, pero ella pareció ver sus ojos brillando con picardía...

Sharon no sabía cómo la subieron al escenario, pero ella ya estaba parada frente a Simon cuando recuperó los sentidos.

Las luces del escenario eran aún más brillantes, y los rasgos de él parecían aún más definidos mientras lo iluminaban. Él sonrió con una expresión reservada y altiva en su rostro. Parecía que todo iba de acuerdo a su plan.

Ella entendió de inmediato cómo fue seleccionada a pesar de no tener un número. Era simplemente un truco. Todo, desde el anfitrión anunciando que él estaría bailando con una empleada hasta hacer que todas eligieran números, había sido un truco elaborado para que ella fuera su pareja de baile y bailaran juntos el baile de apertura.

Lo que ella no entendía era por qué no había elegido a Rebecca para que fuera su pareja.

“¿Por qué? ¿Por qué hiciste esto?”. Mientras los dos estaban solos en el escenario, Sharon lo miró directamente a los ojos y preguntó.

Simon respondió con total naturalidad: “Si puedes bailar con otra persona, ¿por qué no puedes bailar conmigo?”.

¿Qué tipo de razón era esa?

“Pero…”.

Él no le dio la oportunidad de terminar antes de extender sus largos brazos y rodearlos alrededor de su cintura mientras la atraía hacia él. Ella casi choca contra su pecho, pero se las arregló para apoyarse contra él.

Sin esperar su reacción, él chasqueó los dedos. La orquesta recibió la señal e inmediatamente comenzó a tocar un vals romántico.

El hombre alto la guió mientras empezaban a girar en el escenario, y lo único que ella pudo hacer fue seguirle el ritmo. ¿Acaso todos los hombres eran como él, obligando a otros a hacer cosas que no querían hacer?

Su ira se disipó cuando vio la expresión en el rostro de él. Ella incluso sintió ganas de reír.

Quizás él había adivinado lo que estaba pensando, porque luego él la hizo girar varias veces seguidas. Ya sintiéndose mal, esto hizo que Sharon se mareara aún más. Ella apoyó la mano en su hombro.

El hombre la acunó mientras desaceleraba sus pasos. Sus labios delgados se curvaron imperceptiblemente hacia arriba mientras le susurraba al oído: “Se me olvidó decirte que seas más seria cuando bailes”.

Sharon lo maldijo para sí misma. ‘¡Hombre malvado!’.

Sin embargo, ella ahora no sentía nada más que mareos. Incluso su respiración era cálida.

¿Acaso estaba gravemente enferma?