—Hay bastantes rumores, jefe… de que Marco está con poder y dinero desmedido. Se está comportando cada vez más como si fuera el rey de esta región— dice uno de los guerreros detrás de él, y todo encaja perfectamente con nuestros planes.
—Si no se detiene… nos acabaría a todos— dice Leonardo.
—Has sido de mucha ayuda Leo... —
—Hay algo más... —dice el guerrero y deja a todos quietos. Solo se escucha el viento que pasa por los árboles.
—En estos días Razzio parece querer atacar a otra manada, así que van a estar vulnerables... — dice.
—Van a atacar seguramente a Medianoche...Marco está obsesionado con ellos, aún no sé por qué. Al inicio pensaba que le interesaba los humanos para esclavizarlos, pero ahora… no sé, hay rumores de que le interesa una humana. Algunos dicen que hay una Luna humana. Es una locura. Pero quizás es nuestra oportunidad de detener a Marco— dice Tomás.
Por fin se dan la mano y es mi señal para ver como va el otro lado de la operación.
Yo voy corriendo de vuelta y veo a Andrea sacando a los prisioneros del bar, algunos están en mal estado y los va subiendo en un auto mientras otros miembros de su manada ayudan en una gran operación de rescate.
—¿Funcionó? Necesitamos unos minutos más…hay otra área con prisioneros, incluso un depósito ¡Esto es terrible Fabrizio!— dice ella, veo a lobos del bar muertos a los costados, la pelea debió ser violenta, pero los de su manada ganaron. Inclusive Laura está ayudando, convenciendo a otros y se ve mucho mejor.
—Funcionó muy bien. No te preocupes…y yo les compraré algo de tiempo. Ustedes saquen todo lo que puedan— digo. Yo empiezo a colocar gasolina por todo el bar y le doy un encendedor a Andrea.
—Cuando sea el momento ya sabes lo que tienes que hacer… saquen a todos cuanto antes y tomen las pruebas necesarias. Y vayan a donde digan los prisioneros que hay más — digo y me voy corriendo de nuevo al bosque y veo de regreso a Tomás, Leonardo y los otros guerreros.
De inmediato me posiciono y empiezo a disparar con balas de wolfsbane, muy atento de herir muy levemente a Leonardo y así parezca todo muy real.
—¡Nos atacan!— gritan ellos. Me quito la ropa de lobos y el viento les lleva mi olor.
—¿Vampiros? ¿Qué demonios?— grita Tomás.
Yo voy rápidamente disparándolos, un guerrero cae muerto y todos aúllan. Saben que Marco está profundamente involucrado con los vampiros, sin contar que son ellos quienes usan estas balas de wolfsbane.
—¡Se fue por allá! ¡Corran tras él!— gritan, pero no podrán alcanzarme.
Comentários
Os comentários dos leitores sobre o romance: Una curvy para el Alfa
La estoy matando, pero necesitamos los capítulos que siguen por favor...
Apasionante, mas capitulos!...
Me encanta...