Una curvy para el Alfa romance Capítulo 18

Resumo de Capítulo 0018: Una curvy para el Alfa

Resumo de Capítulo 0018 – Uma virada em Una curvy para el Alfa de GoodNovel

Capítulo 0018 mergulha o leitor em uma jornada emocional dentro do universo de Una curvy para el Alfa, escrito por GoodNovel. Com traços marcantes da literatura Hombre-lobo, este capítulo oferece um equilíbrio entre sentimento, tensão e revelações. Ideal para quem busca profundidade narrativa e conexões humanas reais.

Tatiana

—¿Esperas a alguien? ¿Andrés, quizás?— me pregunta Mariela mientras yo veo al salón en el restaurante.

Era el último día de los alfas aquí… y yo me sentía aliviada, pero a la vez incómoda. Y no sabía por qué, esto era lo que yo más quería ¿No? Que ellos se fuera, que el pueblo fuera el típico pueblo normal y común donde nada sucedía… bien lejos de los hombres lobos.

Entonces… ¿A quién esperaba? Quizás a alguien que no había visto en días… no, no. Yo a él no lo extrañaba.

—Eh… no, no a nadie. De hecho, Andrés no ha aparecido— contestaba yo.

Con él las cosas eran un poco así, iba y venía. No sé si era porque estaba con otras chicas, yo no le interesaba lo suficiente o qué.

Me respondía de vez en cuando como para mantenerme ahí atenta, pero nada más. Y después de esa última cita, todo había sido bastante extraño.

—Pues… entonces no te merece— decía Mariela firme. La veía contenta, limpiando las mesas y lanzándome miradas

—¿Qué sucede? ¿Estás leyendo otros de esos libros de… hombres lobos?— pregunto y ella voltea los ojos.

—¡Gracias por preguntar! Para tu información… siempre los leo. Recién leí uno de una chica que tenía dos alfas…mmm sexy muy sexy…— dice ella y yo pongo cara de horror. Suficiente malo tener uno cerca, no me quiero imaginar dos.

—Pero… no era eso lo que quería contarte… — dice y ya me imaginaba que se traía algo entre manos.

—Bien… escupe—

—Resulta ser que tu admirador, tú sabes alto, musculoso, cabello oscuro y ojos azules… te lo repito porque parece que siempre se te olvida quién es….— dice y yo volteo los ojos. No quiero ni saber de él, pero no le he hablado de Sebastián a ella. Francamente, no sé ni como.

—... buscó a Gaby para hablar. Parece que está muy encantado con el pueblo y quiere ayudar a hacerlo… un lugar mejor— dice ella sonriente.

—¿Como hacerlo mejor?—

—¡Excelente pregunta! El papucho quiere que él y otros empresarios participen de asambleas aquí y van a venir varias veces al mes, tú sabes… ser parte de nuestra comunidad ¿Qué te parece?—, pregunta ella y yo me quedo perpleja.

—¿Que qué me parece? ¡Espantoso!— digo yo y creo que mi expresión sonó exagerada. Ella tiene cara de perdida.

—¿Por qué? ¡Quieren ayudarnos!—

—Esa gente… esos hombres… son malos… malos en serio— digo yo de forma nerviosa.

—Pues ya que tú pareces haberte olvidado de mí, he venido a verte— dice él y yo lo miro confundida.

—Pero si yo te he escrito y tú poco me has contestado…— le digo.

Yo suponía que era una chica como cualquier otra y si bien no me gustaba estar detrás de los hombres suplicando atención, alguien tenía que hacer el intento. Pero para ser honesta, aparte de esta extraña visita, él no solía dar los primeros pasos.

Era yo la que terminaba diciendo que nos viéramos para algo y terminamos teniendo alguna cita... o simplemente quedamos hablando entre mensaje y mensaje y nada más. Y era desgastante.

—Pues yo... he estado muy ocupado en el trabajo y es evidente que tú también…— dice mirándome con rabia y no entiendo a qué se refiere.

—Si el restaurante y…—

—Me han dicho que han visto un hombre entrando a tu casa, como si nada e inclusive desnudo— dice él y yo me ofendo.

—¿Qué dices? ¿Quién dijo algo así?— pregunto ofendida.

—¿Es cierto? Dime la verdad—

Histórico de leitura

No history.

Comentários

Os comentários dos leitores sobre o romance: Una curvy para el Alfa