Teatro de la Ópera.
Esta vez, cuando Rafaela volvió a ir al teatro con Alonso Cruz, notó que la trama trágica de los personajes había cambiado sin que supiera cuándo. Los protagonistas, en lugar de perderse para siempre, no se separaban. El protagonista masculino regresaba y, al encontrar a la mujer aún esperándolo, ambos volvían a enamorarse, se reconciliaban y, al final, tenían un hijo adorable. Rafaela vio al pequeño actor salir tras bambalinas y esperó hasta el último momento del saludo final de los actores.
Para Rafaela, aquella escena era simplemente perfecta.
Alonso observó la reacción de Rafaela. “¿Te gustó este final?”
Rafaela le preguntó: “¿Tú lo cambiaste?”
Alonso intentó sondear sus emociones. “Siempre que venías te quedabas triste, así que pedí que reescribieran el final. Pasaron de perderse al principio a reencontrarse y enamorarse de nuevo. Creo que este tipo de final conecta más con la gente. En la vida real, muchos pierden a alguien solo por una oportunidad perdida. Como no se puede volver atrás en la vida, al menos en la obra podemos compensar esa tristeza.”
En ese momento, el director del teatro se acercó y, con una sonrisa algo apurada, dijo: “Sr. Cruz, Srta. Rafaela, afuera ya hay público esperando la siguiente función, ¿podrían…?”
Rafaela preguntó: “¿Ha venido mucha gente?”
El director asintió con una sonrisa. “Sí, estos días hemos tenido lleno total. Todos vienen atraídos por el nuevo final perfecto, y eso es gracias a las ideas y apoyo del Sr. Cruz. Si no fuera así… antes solo venían ustedes dos, y ya casi no me alcanzaba ni para pagarle al elenco.”


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Comentarios
Los comentarios de los lectores sobre la novela: Venganza Reencarnada de la Rica Heredera
Excelente novela...