Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 115

Sus rápidos ataques no le dieron tiempo a reaccionar. La dinámica de poder entre ellos había cambiado en un instante.

Elsa se agarró el abdomen. Hizo una mueca de dolor mientras se agachaba en el suelo, luchando por recuperar el aliento. Mientras tanto, el hombre levantó su pistola. Su voz estaba llena de desprecio cuando preguntó: "Z*rra, ¿de verdad crees que soy tan fácil de enfrentar?".

Kenji preguntó en tono amenazador: "¿Qué pasa, Rambo?".

El hombre conocido como Rambo respondió: "Jefe, esta mujer irrumpió para preguntar por la sesión de juego. Parecía preparada, así que la atraje aquí a propósito".

Kenji miró a Elsa y luego a Wilbur. Dijo despacio: "Parece que los dos están trabajando juntos".

"Se podría decir que sí", contestó Wilbur con indiferencia.

Kenji soltó una risita y dijo: "Parece que lo has planeado todo. ¿Intentas tenderme una trampa?".

"Sí". Wilbur sonrió.

Kenji se burló y preguntó: "¿Solo ustedes dos? Es un chiste. Entonces, ¿cuál es el plan ahora?".

"Es la vicecapitana del Departamento de Investigación Criminal. ¿Te atreverías a ponerle un dedo encima?". Preguntó Wilbur.

Kenji respondió fríamente: "Me da igual quién sea. Cualquiera que se atreva a acercarse a mí será carne muerta".

Elsa recuperó por fin las fuerzas. Declaró con severidad: "Kenji, eres demasiado audaz. Tener contactos no te permite tener las manos libres. No te saldrás con la tuya si nos pasa algo a alguno de los dos. Mucha gente sabe que estoy aquí, así que piénsalo bien".

"¿Pensarlo bien?". Kenji se burló y dijo: "Lo he pensado muy bien. Voy a deshacerme de los dos inmediatamente".

"Kenji, alguien rastreará la pista hasta aquí si nos pasa algo. No te saldrás con la tuya", soltó Elsa.

Kenji se echó a reír y dijo: "Tranquilos, los que sepan que están aquí no se atreverán a decir ni pío. El poder de nuestro clan Lilith va mucho más allá de su imaginación. Rambo, deshazte de ella primero".

"Sí, señor".

Wilbur sonrió. Se levantó de repente y, sin ningún movimiento visible, una oleada de fuerza invisible emanó de él, obligando a los dos guardaespaldas a retroceder.

Entonces, se giró rápidamente y lanzó una patada voladora. Los dos guardaespaldas lanzaron gritos de dolor al salir volando.

A continuación, Wilbur apareció frente a Rambo con un rápido movimiento. Rambo tuvo la visión borrosa por un momento y recibió un fuerte puñetazo en la nariz. Su sangre salpicó el aire mientras su voluminoso cuerpo salió volando.

Wilbur recogió despreocupadamente la pistola que Rambo había dejado caer y jugueteó un rato con ella.

Los dos guardaespaldas y Rambo cayeron pesadamente al suelo.

Su rápida secuencia de acciones había tenido lugar en un abrir y cerrar de ojos. Kenji y sus matones no tuvieron oportunidad de comprender lo que acababa de ocurrir.

Todo lo que vieron fueron a los dos guardaespaldas y a Rambo derribado inexplicablemente.