Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 503

"¿Ocurre algo más?", preguntó Wilbur.

Dom exclamó: "¡Ni siquiera le hemos dado las gracias por lo mucho que nos ha ayudado, señor! No puede irse así a toda prisa".

"Así es. Al menos quédense unos días más para que podamos agradecérselo", dijo Sammy, con la cara enrojecida.

Dom la miró, alzando las cejas de forma pensativa.

Sin embargo, Wilbur sacudió la cabeza. "Tengo un enorme lío que resolver en la Ciudad Seecher, de verdad que no puedo quedarme. Sé que les gustaría darme las gracias, pero tengo que irme".

Ambos hermanos hicieron todo lo posible por convencer a Wilbur, pero él insistió en marcharse. Al final, Dom solo pudo ofrecerse a comprar los pasajes de avión de Wilbur y Chester y enviarlos al aeropuerto.

Antes de despedirse de ellos, Dom dijo: "Señor, no me he olvidado de las acciones. Yo mismo le llevaré los documentos de transferencia a la Ciudad Seecher en cuanto los tenga listos. No se preocupe por eso".

"Eh, de verdad que no tienes que hacer eso", dijo Wilbur.

Sin embargo, ambos hermanos se mostraron inflexibles a la hora de ampliar el gesto y Wilbur no pudo hacer otra cosa que ceder al final.

Wilbur hizo unas cuantas llamadas a la Ciudad Seecher para arreglar algunas cosas y se subió al avión de vuelta con Chester.

Skyler ya los esperaba en el aeropuerto y los llevó directamente de vuelta a la Isla Lago Marino.

A eso de las nueve de la noche, Wilbur y Chester se dirigieron a una de las salas de reuniones de la isla.

En la sala estaban Gerard Torrent del clan Torrent, Matt Lilith del clan Lilith, Ian Owens del clan Owens, y Gertridge Quick, la asesina.

Era perfectamente comprensible que Gerard y Matt estuvieran allí. Al fin y al cabo, eran los líderes de sus respectivos clanes. A Wilbur le sorprendió que Ian, el sobrino de Jeremy Owens, hubiera sido elegido para representar al clan en lugar de John, el hijo de Jeremy.

"Uno, pueden cortar lazos conmigo por completo y expandirse por su cuenta. Solo tienen que respetar las reglas que he establecido en Ciudad Seecher: no matar a su antojo y no tener negocios ilegales. Dos, pueden convertirse en mis discípulos. Supervisaré sus acciones y decisiones, y trabajarán para mí, pero también me encargaré de su seguridad. Si están de acuerdo, pueden quedarse y vivir aquí. Si eligen la primera opción, pueden irse ahora. No tengo nada que exigir a nadie aquí, ni me preocupa que ninguno de ustedes pueda hacerme algo".

El resto de la sala se sorprendió bastante ante aquellas palabras.

Chester fue el primero en hablar, sonriendo al decir: "Bueno, ya he tenido el honor de prometer mi lealtad como uno de los discípulos de mi maestro".

Gertridge también se levantó sin dudarlo. "Yo, Gertridge Quick, juro ser una de los discípulos del maestro Wilbur Penn. Seré leal el resto de mi vida y nunca lo traicionaré ni seré objeto de ningún castigo que se me imponga".

Todos los presentes sabían que Gertridge estaba en plena caza de su anterior escuadrón de asesinos y era perfectamente comprensible que aprovechara la oportunidad de convertirse en discípula de Wilbur.

Tras la declaración de Gertridge, Gerard y Matt la siguieron sin vacilar con sus propias declaraciones de convertirse en discípulos de Wilbur.

Ya habían sido leales antes de esto y ahora tendrían cargos oficiales.