Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 861

El simio soltó un aullido. Las ondas de energía de este aullido ensordecedor casi hicieron que algunas personas se desplomaran de inmediato.

Las expresiones de todos cambiaron, temblando ante el simio.

Los tres cultivadores de nivel Santuario apenas habían podido sobrevivir a un solo golpe de esta bestia. ¿Qué esperanza había para el resto?

Al mismo tiempo, el simio gigante había empezado a abalanzarse sobre el resto de la multitud.

Los aventureros se dispersaron como ratones, sin prestar atención a las otras bestias.

Sin embargo, justo en ese momento, Sheldon se puso en pie y rugió: "¡Que nadie huya! Lucharemos juntos contra esta bestia".

La multitud se sobresaltó, pero Kaxx también se levantó y blandió amenazadoramente su alfanje hacia la multitud. "Mataré a cualquiera que intente huir. Ahora luchen contra esta bestia".

Todos los demás jadearon. Estos cultivadores de nivel Santuario los estaban utilizando como carnada.

Uno de los aventureros sintió que algo iba mal y echó a correr.

Kaxx blandió su alfanje, matando al aventurero rápidamente.

La multitud estaba conmocionada. Nadie podía creer que un cultivador de nivel Santuario hiciera algo así.

Gobu intervino entonces. "Agarren al monstruo y sujétenlo".

Comenzó a dibujar runas en el aire. Una poderosa presión espiritual surgió de su cuerpo, y estaba claro que se estaba preparando para un hechizo bastante poderoso.

Ante las amenazas de Kaxx y Sheldon, los aventureros no tuvieron más remedio que apretar los dientes y cargar contra el simio gigante.

Por supuesto, el poder del simio estaba muy lejos de lo que eran capaces de manejar.

En cuestión de segundos, varios aventureros murieron y una docena resultaron heridos.

También había otras bestias, pero la multitud no tuvo más remedio que seguir luchando con vida.

Justo entonces, la mirada de Kaxx se posó en Wilbur y el resto, y gritó en medio de la pelea: "¿Qué demonios hacen ahí parados? ¡Vayan!".

Cameron y el resto palidecieron. ¿Qué diferencia había entre luchar contra una bestia como esa y caminar directamente hacia una trampa mortal?

Sin embargo, si se negaban, correrían la misma suerte que el aventurero que intentó huir hace un momento.

De repente, Cameron y Dawson cayeron en un terrible dilema.

El simio gigante seguía atacando a ciegas, mientras Kaxx y Sheldon unían sus fuerzas para llevar a los aventureros a una batalla a muerte.

Gobu seguía dibujando sus runas, con la energía espiritual retumbando en su cuerpo.

Dawson dudó. "¿Qué vamos a hacer?".

"Nada. Por mí pueden morir todos", dijo Wilbur con frialdad.