Amor Adictivo de CEO romance Capítulo 1067

Charlotte ignoró el dolor y volvió a levantarse. Luego, empujó la puerta antes de que Zenios pudiera cerrarla y se metió en el estudio de Zenios.

La expresión de Zenios se oscureció y una oleada de ira inundó su corazón. Él señaló su rostro con un dedo tembloroso mientras sus labios bien formados temblaban vigorosamente.

“Ya te lo advertí, y te lo diré de nuevo, deja de profanar su nombre. Te has pasado de la raya, y si no quieres que te golpee, ¡entonces sal de mi casa ahora mismo!”.

Charlotte suspiró y dijo inocentemente: “Lo sé. Sé que es casi imposible que me creas, pero ¿puedes dejar de ponerte tan furioso cuando digo su nombre? Piénsalo con calma. Sé lo triste que estás por su muerte, así que, ¿por qué usaría su muerte para provocarte sin razón? ¿Crees que soy tonta?”.

Aunque Zenios había recuperado la compostura, su mirada todavía estaba llena de indignación y frialdad mientras la miraba. “¡Prefiero creer que eres una tonta que creer que hay fantasmas en este mundo!”.

Charlotte sonrió significativamente: “¿Estás seguro de eso? ¿Quieres probarlo?”.

Zenios estaba estupefacto. “¿Probarlo? ¿Probarlo cómo?”.

“Es sencillo”. Charlotte señaló la mesa de Zenios.

“En los últimos cuatro años, Charlotte ha estado apareciendo frecuentemente en mis sueños, y anoche, volvió a aparecer en mi sueño. Ella dijo que te extrañaba y me pidió que fuera a verte. También dijo que después de que nos encontráramos, solo tenías que poner una foto de ella junto a una vela en una mesa y cantar su nombre tres veces. Entonces ella poseerá mi cuerpo y ustedes dos podrán verse”.

'¿¡Eh!?'.

Zenios sintió que la mujer frente a ella estaba poniendo a prueba su paciencia.

Temiendo que Zenios la echara nuevamente, Charlotte agregó apresuradamente con una sonrisa: “En este momento, todo lo que tienes que hacer es calmarte. Como ya estoy aquí, solo tienes que hacer lo que te dije y sabrás si estoy mintiendo o no. Sé cuánto extrañas a Charlotte. ¿Y si estoy diciendo la verdad? Entonces, podrás volver a verla, ¿cierto? Además, no hay nada de malo en intentarlo. Si descubres que realmente te estoy mintiendo, puedes echarme de tu casa entonces. ¿Te parece?”.

Zenios la miró fijamente y asintió con una mirada seria después de pensar por un momento.

“¡Espera aquí!”.

Cuando él estaba en la universidad, también había sido uno de los mejores estudiantes en el Departamento de Física. Como alguien que creía en la ciencia, la evocación o llamar de vuelta al alma no era más que basura para él.

Después de un rato, Zenios regresó con una foto y una vela en la mano. Dejó la foto sobre la mesa, encendió la vela con un encendedor y miró con desdén a Charlotte.

“Señorita Green, ¿cuándo tengo que llamar su nombre para que funcione?”.

Charlotte le respondió con severidad: “Carlie no lo dejó claro en mi sueño. ¿Por qué no intentas decirlo ahora?”.

Zenios apartó la mirada de ella y la llamó.

“Charlotte Simmons, Charlotte Simmons, Charlotte Simmons”.

En el momento en que terminó de cantar su nombre, vio que Charlotte puso los ojos en blanco y cayó al suelo, dejándolo atónito.

Justo cuando estaba a punto de ayudarla a levantarse, ella misma se levantó del suelo. Ella miró a Zenios con los ojos llenos de tanta dulzura y dijo: “Zenios, te extrañé mucho. Finalmente nos volvemos a encontrar”.