Amor Adictivo de CEO romance Capítulo 34

Charlotte subió al coche.

“Ahora dime. ¿Cómo demonios te las arreglaste para cruzar el río con el coche?”, Zachary preguntó casualmente mientras se sentaba en el asiento del conductor.

Charlotte se habría olvidado por completo de eso, si él no lo hubiera mencionado.

Ella miró por la ventana, distraída. “Este río parece profundo en la superficie, pero hay dos pilares de piedra escondidos en sus profundidades. La superficie de los pilares de piedra se encuentra a unos 20 centímetros por debajo del agua. La distancia entre esos pilares de piedra es similar a la distancia entre los neumáticos de un coche. Los usé para conducir a través del río”.

“¿Oh?”, reflexionó Zachary.

Él era el Rey de las Carreras de Lanzamiento, que había conducido a través de todos los terrenos difíciles en Rothesay, pero no estaba al tanto de esta joya escondida. ¿Cómo hizo una pequeña chica frágil como ella para saber esto?

Una pizca de tristeza cruzó por los ojos de Charlotte, ya que sabía exactamente lo que estaba pensando Zachary.

“A Bryson le encantaban las carreras de motocicletas. Me uní a su caravana solo para hacerle compañía. Prácticamente exploré cada rincón de Rothesay durante los paseos en moto con él. Él y yo descubrimos el secreto de ese río por accidente el año pasado”.

Zachary se sintió extrañamente incómodo cuando Charlotte mencionó a Bryson. “Nunca me aprovecharía de otro ser humano. Si no puedes dejar ir a tu exesposo, estaría feliz de darte el divorcio”.

'¿Mi exesposo? ¿Por qué eso sonó tan irónico?'.

¡Era la verdad!

Ella pudo haber tenido una fiesta de bodas con Bryson, pero ellos en realidad nunca registraron su matrimonio. Ella y Bryson no eran realmente considerados marido y mujer, después de todo.

Como una de las partes involucradas, ella no pudo ver la verdad en ese momento.

Considerando todo, quizás Bryson nunca la consideró su esposa. Ella, por otro lado, había considerado a Bryson como el único hombre para ella. Charlotte se había dedicado por completo a él y estúpidamente cargó al hijo de un extraño por su bien…

¿Quién no tomó decisiones estúpidas en su juventud?

¿Qué clase de chica no se encontraría con un imbécil o dos?

La mansión de Zachary era enorme. El complejo tenía 10,000 metros cuadrados e incluía una lujosa piscina, un campo de golf y un helipuerto. El complejo principal tenía 99 salas de estar y 201 dormitorios. Cualquiera que no estuviera familiarizado con el área se perdería fácilmente.

Un sirviente tomó el equipaje de Charlotte y lo llevó al segundo piso. “Usted es la esposa del Señor Connor, por lo tanto, la señora de esta casa”, dijo el sirviente, señalando el dormitorio número siete. “Puede dormir en cualquier habitación que quiera, a excepción de la habitación número siete. No tiene permitido entrar allí sin el permiso del Señor Connor”.

“¿Por qué?”, preguntó Charlotte, sintiéndose desconcertada.

“Porque esa es la habitación del Señor Connor. El señor es un hombre con principios. Él no permite mujeres en su habitación”.

'¡Bien! ¿Tenía que ser tan rebuscado? Bien hubiera dicho mejor que “Zachary Connor no quiere dormir contigo y no te quiere en su habitación”'.

Las acciones de Zachary no la sorprendieron en absoluto.

Ella podía sentirlo, Zachary no solo la detestaba. Él quería estar lo más lejos posible de ella. Ella, por otro lado, no sentía nada por él. Si Zachary hubiera insistido en dormir en la misma cama que ella, se habría sentido muy incómoda.