Amor Adictivo de CEO romance Capítulo 947

“Tiria, dijiste que querías esperar a nuestra noche de bodas y que luego te entregarías a mí. He esperado este día durante mucho tiempo. Por fin, eres oficialmente mi esposa y vamos a consumar nuestra relación como marido y mujer esta noche, ¿de acuerdo?”.

Los labios de Sotiria temblaron.

Ella sabía que Garrison la amaba de verdad y que era un hombre sano y apasionado. En los últimos cuatro años de su relación, Garrison le había pedido que compartiera la cama con él. Sin embargo, ella se negaba decisivamente cada vez.

Ella le había dicho a Garrison que solo daría ese paso con él después de casarse.

¡Garrison!

Él la trataba mejor que nadie en este mundo. Él había sufrido demasiado a causa de ella. ¡Esta noche, no podía permitir que siguiera sufriendo, sin importar qué!

¡Como su esposa, tenía que cumplir con su deber y darle hijos!

“Esta es nuestra primera vez. Espero que sea el recuerdo más hermoso para nosotros. Tiria, ¿dónde te gustaría hacerlo? ¿Aquí? ¿O en la cama?”.

Garrison estaba muy emocionado. Su voz magnética era tan cálida como las llamas y temblaba al mismo tiempo.

Sotiria se sonrojó mientras respiraba hondo. “En la cama”.

“Bien”.

Su cuerpo se movió. Garrison la había recogido en sus brazos.

Él la colocó suavemente sobre la cama y se quitó su traje nuevo y bien planchado. Se apoyó en sus brazos mientras se cernía sobre su cuerpo. Sus ojos, habitualmente claros y estrellados, ahora ardían con llamas apasionadas gracias al alcohol y las emociones fuertes.

“Te amo, querida esposa”.

'¡Zachary! ¡M*ldita sea! ¿Por qué estoy pensando en él ahora?'.

Ella sintió una extraña sensación en su piel. Eran los finos labios de Garrison.

Había tomado una decisión, así que cerró los ojos.

'¡Así es! Garrison es un hombre que verdaderamente merece mi amor. Darle todo lo que tengo valdrá la pena. Voy a entregarme a él y convertirme oficialmente en su mujer. Tal vez no me pueda acostumbrar al principio, pero todo es difícil al principio. Después de esta noche, mi cuerpo se acostumbrará gradualmente a él y lo aceptará, tal como dijo. De ahora en adelante, le daré muchos bebés, lo cuidaré a él y a nuestros bebés y viviremos nuestras vidas juntos en felicidad”.

“¡Ah! ¡Tiria! ¡Yo… yo!”.

Garrison de repente dejó escapar un grito bajo y agonizante.

Sotiria tenía un mal presentimiento sobre esto. Abrió los ojos y miró nerviosamente a Garrison, cuyo cuerpo estaba encima del suyo. “Garrison, ¿qué ocurre?”.